La Universidad de Colima (UdeC) reafirma su compromiso con la innovación y el impacto social a través del destacado proyecto liderado por Roberto Carlos López Rodríguez, estudiante de nuestra Facultad de Ingeniería Mecánica y Eléctrica (FIME). Ese joven universitario asumió un reto loable: rediseñar un dispositivo de pedaleo terapéutico para personas con parálisis cerebral, integrando sistemas electrónicos inteligentes que optimicen la seguridad, personalización y eficacia del tratamiento.
El avance tecnológico logrado en ese dispositivo no solo moderniza un proyecto diseñado originalmente en 2012 por el investigador Hugo Álvarez Valencia, sino que también demuestra la relevancia de la colaboración interdisciplinaria en la resolución de problemas complejos. Con la incorporación de sensores que monitorean parámetros vitales, un microcontrolador y una microcomputadora, esa innovación promete ofrecer mayor autonomía y seguridad a los pacientes, además de reducir la carga física de sus cuidadores.
Es destacable que la motivación de Roberto López no sea meramente técnica, sino profundamente personal y humana. Su experiencia en instituciones de rehabilitación le ha permitido entender las necesidades de los pacientes y transformar ese entendimiento en una solución tangible. Ese enfoque centrado en las personas subraya el verdadero valor de la ciencia y la tecnología cuando se aplican con propósito y empatía.
El respaldo de la Secretaría de Ciencia, Humanidades, Tecnología e Innovación (SECIHTI), a través del programa MADTEC-2025-M-386 valida el potencial de ese proyecto no solo como una propuesta innovadora, sino también como una respuesta concreta a necesidades prioritarias en el ámbito de la salud. Esa distinción no solo permitirá el desarrollo y perfeccionamiento del dispositivo, sino que abre las puertas a su implementación práctica, con lo cual se beneficiará directamente a quienes enfrentan las limitaciones de la parálisis cerebral.
Por supuesto que en la UdeC celebramos con entusiasmo ese tipo de iniciativas que no solo proyectan a nuestra institución como un referente en investigación y desarrollo, sino que también reafirman el compromiso ético y social de sus estudiantes y académicos. Ese proyecto no es únicamente un logro técnico; es un testimonio del poder transformador de la educación y de cómo el conocimiento puede y debe aplicarse en beneficio de la sociedad.
En un Mundo cada vez más necesitado de soluciones inclusivas, la labor de Roberto López y su equipo nos recuerda que la verdadera innovación no radica únicamente en crear tecnologías avanzadas, sino en utilizar esas herramientas para mejorar la vida de las personas.