COLUMNA: Cotidianidad
Los años pasan
Por Karla Aliset Morfin Arredondo
Mientras más pasan los años nos damos cuenta que las cosas que no cuestan dinero son las de mayor valor. Cinco minutos bastan para soñar toda una vida, así de relativo es el tiempo. Los años pasan, las cosas cambian, te adaptas a algunas y otras solo las aceptas sin entender el motivo del porque ocurren, pero aprendes a vivir con ellas.
Cada año de tu vida te ha dado una experiencia, has aprendido a confiar en ti mismo. Tienes claro lo que quieres, sabes rechazar aquello que no te aporta a ser mejor, te arreglas para ti y no para los demás.
Los años pasan y descubres que cada día no es uno más sino uno menos por tu paso por esté mundo, que no te llevarás el dinero que hiciste, ni los grados que obtuviste, sino las huellas que dejaste en tu trayecto y los corazones que inspiraste. Los años pasan y tu rostro envejece, pero cada arruga queda sellada por los momentos que te dejaron sin aliento y sacaron de ti una sonrisa, una sonrisa que jamás borraras de tu memoria.
