El rey de España, Felipe VI, defendió la vigencia y los pilares fundamentales de la Constitución española, que al cumplir 40 años, han permitido el mayor periodo de convivencia política y democrática a este país.
El monarca encabezó los actos por el 40 aniversario de la Carta Magna (que se votó en referéndum el 6 de diciembre de 1978), en una sesión solemne del Parlamento español, que contó con los tres ponentes constitucionales vivos y expresidentes del Gobierno.
El Congreso de los Diputados vivió una imagen inédita al juntar en esta ceremonia a los reyes eméritos Juan Carlos I y Sofía, los reyes Felipe VI y Letizia, la princesa Leonor y la infanta Sofía con los altos representantes del Estado y los parlamentarios.
Asimismo, los exjefes de Gobierno Felipe González, José María Aznar, José Luis Rodríguez Zapatero y Mariano Rajoy, y los ponentes constitucionales, José Pedro Pérez Llorca, Miguel Herrero de Miñón y Miquel Roca.
En la ceremonia fueron muchas menciones a los ponentes constitucionales ya fallecidos: Manuel Fraga, Gregorio Peces-Barba, Gabriel Cisneros y Jordi Solé i Tura.
En su mensaje, el rey expuso que transcurridos ahora ya 40 años bajo la vigencia de la Constitución, “España ha vivido, sin duda, el cambio político, territorial, internacional, económico y social más profundo y más radical de su historia”.
“En el ámbito político, hoy -sobre todo y felizmente- podemos afirmar que la democracia está firme y plenamente consolidada. Las jóvenes generaciones nacen, se educan y se desarrollan en una sociedad democrática y los valores constitucionales impregnan la vida diaria”, dijo.