Inauguran Festival Zanate con sala llena para ver “Toloriu”, de Patricia Ordaz

Este domingo (21 de noviembre) se inauguró en la Pinacoteca Universitaria la 14 edición del Festival Zanate, con sala llena para presenciar la función Toloriu, dirigida por la realizadora mexicana Patricia Ordaz, que narra la historia de un pequeño pueblo catalán.
“Me interesaba mucho retratar el hecho de que está desapareciendo en el sentido de que ya no vive nadie pero que lo más importante en realidad era como el arraigo que tienen a su pueblo, porque aunque no vivan ahí siguen yendo cada año, siguen celebrando la fiesta justamente para no perderlo”, aseveró la realizadora.
Toloriu, a pesar de ser un pueblo catalán, no se acostumbra a escuchar música catalana, si no, música mexicana.
“Llegué a él (Toloriu) buscando esta historia que, de solo escucharla, sentía que me pertenecía: hace quinientos años Joan de Grau, Barón de Toloriu, fue a conquistar tierras lejanas y a su regreso trajo consigo a Xipahuatzin, una princesa del más grande imperio mexicano. Encontrar los vestigios de esta leyenda, me hizo emprender un viaje al imaginario de un pueblo: su música, sus veranos, su miedo a desaparecer”, afirmó.
De acuerdo a un boletín de prensa, Patricia Ordaz asegura que la palabra “volver” fue muy importante en este filme, ya que, tanto personalmente para la directora, como con las historias de los personajes, el regresar a un lugar era lo que todos buscaban.
“Justamente la palabra volver fue crucial por la canción, más allá de eso, yo sentía que teníamos que terminar con la canción de “Volver, volver” (de Vicente Fernández) porque todos teníamos como algún punto a dónde volver. La princesa nunca pudo volver a ver su tierra, la gente de Toloriu siempre vuelve a Toloriu y yo en ese momento lo único que deseaba era regresar a México y ponerle fin a mi aventura en España”.
Finalmente, Patricia Ordaz habló de la narración que le da voz a la leyenda y que en su opinión une toda la película.
“Muchas personas me decían que podía hacer esta película, porque de alguna manera, aunque no tenía nada que ver mi vida con el de la princesa, esa sensación de estar lejos y de sentirte como en un lugar que no sientes tuyo, me decían que yo podía contar la historia, así fue como surge hacer la voz en off de esta película que creo que es lo que une todo el documental”.