El alto representante de la Unión Europea (UE) para Asuntos Exteriores, el español Josep Borrell, avisó este martes de que los Veintisiete “seguirán ejerciendo presión al régimen bielorruso mientras sea necesario”, ahora que el 9 de agosto se cumplen 3 años de las últimas elecciones de 2020, consideradas fraudulentas por Bruselas y la oposición de ese país.
“Hoy, 3 años después, la situación es peor que nunca para aquellos que se atreven a expresar cualquier crítica al sistema. Estamos hondamente preocupados por la situación de los derechos humanos en Bielorrusia”, afirmó Borrell en un comunicado escrito en nombre de todos los países de la UE.
El jefe de la diplomacia comunitaria reivindicó las sanciones de los Veintisiete contra el régimen bielorruso que lidera el presidente Alexandr Lukashenko, y las definió como una “respuesta a la represión”, a las “violaciones del Derecho internacional” y al “apoyo a la guerra de agresión de Rusia contra Ucrania”.
La UE aprobó el pasado jueves el último de los 7 paquetes de sanciones adoptados hasta ahora contra Bielorrusia, y que, a juicio de Borrell, “envía la señal de que la UE sigue plenamente comprometida a apoyar los derechos humanos y la democracia”.
Con el último paquete, ya son 233 personas y 37 entidades sancionadas por la UE y, además, las restricciones de la semana pasada también ampliaron la prohibiciónde exportar a Bielorrusa armas de fuego y tecnología aérea y espacial, a fin de evitar que las sanciones a Rusia puedan ser esquivadas a través de Minsk.
“El régimen de Lukashenko ha llegado a ser una amenaza también para la seguridad regional e internacional”, justificó Borrell en el comunicado.
En concreto, el jefe de la diplomacia comunitaria afirmó que la UE “está preocupada” por el reciente despliegue en Bielorrusia de varios miles de mercenarios rusos del grupo Wagner y alertó de “los efectos desestabilizadores” de su presencia en el país.
Borrell también enumeró otros incidentes que han enfrentado a la UE con Lukashenko, como, por ejemplo, la instalación este año de cabezas nucleares rusas en territorio bielorruso o la crisis provocada en 2021 en la frontera con Polonia tras la llegada masiva de migrantes gracias al apoyo de Minsk.
Con todo, el Alto Representante de la UE para Asuntos Exteriores denunció la existencia de casi 1,500 presos políticos “expuestos a malos tratos y torturas” en Bielorrusia, y afirmó que el club comunitario “está prestando apoyo a las víctimas de la represión” en el país y a los defensores de los derechos civiles.
“Pedimos a las autoridades de Bielorrusia que entablen un diálogo genuino e inclusivo con todos los elementos de la sociedad que conduzca a unas elecciones libres y justas”, reclamó Borrell.
El político español aseguró que “una vez Bielorrusia emprenda una transición democrática”, la UE ayudará al país a “estabilizar su economía y reformar sus instituciones” y recordó que el club comunitario está dispuesto a desembolsar un apoyo económico de 3 mil millones de euros cuando el país se rija por la democracia.
Las últimas elecciones presidenciales de 2020, de las cuales se cumplen 3 años este 9 de agosto, se celebraron tras la exclusión de varios candidatos opositores y terminaron con la victoria de Lukashenko, en medio de una oleada de protestas y de acusaciones de fraude por parte de la oposición democrática.