Francisco, el primer pontífice en participar en una cumbre de líderes del G7, las 7 mayores economías del Mundo, se reunió hoy con el presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, en uno de los 10 encuentros bilaterales del papa en su intensa jornada la reunión de Apulia (sur de Italia).
“Gracias a Su Santidad por las oraciones por la paz para Ucrania, por la cercanía espiritual con nuestro pueblo y por la ayuda humanitaria para nuestra gente”, escribió Zelenski al término del encuentro, en el que ambos se mostraron sonrientes en las imágenes difundidas por la Santa Sede.
El jefe del Estado ucraniano explicó que dialogaron de “las consecuencias de la agresión rusa contra Ucrania, del terror aéreo ruso y de la difícil situación del sistema energético”.
“También hablamos de la Fórmula de Paz, del papel de la Santa Sede en la consecución de una paz justa y duradera para Ucrania y de las expectativas para la Cumbre Global de Paz”, agregó Zelenski sobre la cumbre internacional de este fin de semana en Suiza, en la que Ucrania aspira a recibir el apoyo diplomático de hasta un centenar de países.
El Vaticano, en un escueto comunicado, se limitó a señalar que el Papa se estaba reuniendo con distintos líderes a lo largo de la mañana y que había comenzado sus encuentros con la directora del Fondo Monetario Internacional (FMI), Kristalina Georgieva, y con Zelenski.
El cara a cara con el líder ucranio se produce 3 meses después de que las declaraciones del Papa en las que pedía a Kiev “el coraje de la bandera blanca y de negociar” al ver que está perdiendo la guerra causaran indignación en Ucrania y Zelenski respondiese que eran “los asesinos y torturadores rusos” los que “debían parar la guerra”.
El Papa ha reiterado en múltiples ocasiones sus llamados para una solución negociada a la guerra de Ucrania, algo que no le gusta a Zelenski, que cuando se reunió con él en el Vaticano le pidió que condenase “los crímenes rusos en Ucrania porque no puede haber igualdad entre víctima y agresor”.
Tras las 2 primeras reuniones, Francisco mantuvo otros 2 encuentros con el presidente francés, Emmanuel Macron, y el primer ministro canadiense, Justin Trudeau, y por la tarde se reunirá también con el presidente de Estados Unidos, Joe Biden.
El pontífice mantiene una intensa jornada en la sede de la cumbre, el exclusivo hotel Borg Egnazia, donde aterrizó en helicóptero en el campo de golf del recinto, donde le esperaba la anfitriona, la primera ministra italiana, Giorgia Meloni.
Francisco ha sido invitado por Meloni para participar en una sesión dedicada a la Inteligencia Artificial, una materia que Francisco sigue con mucho interés, pero también sobre energía y la situación en África y en el Mediterráneo, en la que también participarán los presidentes, el brasileño, Luiz Inazio Lula da Silva, y el argentino, Javier Milei.
En la lista de los encuentros bilaterales previstos por el Papa figura Lula Da Silva, con quien mantiene una conocida sintonía, pero no consta una reunión privada con su compatriota Milei.
La agenda marca otros bilaterales con el primer ministro de India, Narendra Modi; el presidente de Turquía, Recep Tayip Erdogan; el de Argelia, Abdelmadjid Tebboune y el de Kenia, William Samoei Ruto.