La canciller Alicia Bárcena adelantó que la presidenta electa, Claudia Sheinbaum, mantendrá la estrategia migratoria ejecutada por el actual mandatario, Andrés Manuel López Obrador, pues ya es “una política de Estado”.
“Esta estrategia mexicana de movilidad humana será transexenal porque lo hemos conversado con la doctora Sheinbaum, con el presidente y con las nuevas autoridades (…) y, desde luego, porque tenemos un marco institucional”, explicó al arrancar la “Reunión hemisférica sobre vías regulares para la migración laboral”.
Esto, argumentó, ha permitido que la visión en el rubro migratorio “ya sea una política de Estado” que engloba a “todas las secretarías” del Gobierno federal.
“¿Qué es lo que nos obligó a México a tomar, ahora sí, el toro por los cuernos? Que, en 2023, tuvimos más de 2.5 millones de personas cruzando por el país”, cifró la canciller, quien en el gabinete de Sheinbaum encabezará la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat).
Asimismo, resaltó la voluntad de convertir el Estado mexicano en “un mejor destino” para la migración.
Estas declaraciones llegan cuando la migración irregular interceptada por México ha subido cerca del 650% en lo que va del año, aunque las detenciones diarias de migrantes en la frontera con Estados Unidos han caído un 68.15% desde el punto más álgido de diciembre.
En su intervención, el secretario del Trabajo, Marath Baruch Bolaños, reiteró la posición de su colega de gabinete, por lo que la política migratoria “trascenderá las fronteras de los gobiernos”.
De hecho, advirtió de que el fenómeno migratorio “no va a terminar” con el adiós de López Obrador, quien concluye el 1 de octubre, lo que le llevó a comprometerse en “impulsar de manera decidida” una verdadera integración laboral de las personas en movilidad.