La Policía de Bolivia detuvo al jefe militar de una unidad en la central Cochabamba que se desempeñaba como “francotirador” y que, según la Fiscalía, tiene relación con el “intento de golpe” de Estado.
El viceministro de Régimen Interior, Jhonny Aguilera, confirmó a EFE que se trata de Vladimir Lupa Salamanca, comandante de la unidad F10 de Cotapachi, en Cochabamba, quien es investigado por los delitos de alzamiento armado y terrorismo.
El director de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (Felcc) de Cochabamba, Freddy Medinaceli, informó que el aprehendido es trasladado a la ciudad de La Paz para que comparezca ante un juez.
Aguilera dijo que “más adelante” se conocerá qué función iba a tener el jefe militar durante el denominado “intento de golpe” de Estado que se ejecutó en La Paz el 26 de junio, con la toma de tropas del Ejército de la sede presidencial liderado por el excomandante destituido de esa fuerza, Juan José Zúñiga.
Sobre la presencia de francotiradores, el ministro de Gobierno (interior), Eduardo Del Castillo, informó el domingo que una aeronave había llegado desde Cochabamba con fusiles de francotiradores.
“Dieron instrucción a todos los francotiradores de trasladarse hacia la ciudad de La Paz. ¿Cómo vino la orden? Hay un documento escrito y firmado. ¿Quién fue el comandante que instruyó traer francotiradores a la ciudad de La Paz?”, cuestionó el ministro.
El operativo realizado este lunes terminó con la detención del comandante de esa unidad militar en Cochabamba. La orden de aprehensión se emitió horas antes de su aprehensión.
