El índice de precios al consumidor (IPC), principal indicador de la inflación en China, creció un 0.5% interanual en julio, lo que supone un avance de 0.3 puntos con respecto al dato del mes anterior, cuando subió un 0.2%.
El indicador, divulgado este viernes por la Oficina Nacional de Estadística (ONE) del país asiático, supera los pronósticos más extendidos entre los analistas, que esperaban un repunte pero más ligero, hasta el 0.3%.
En la comparación intermensual, los precios pasaron de una bajada del 0.2% de junio a un repunte del 0.5% en julio. Los expertos, de nuevo, esperaban que esta medición subiera pero solo hasta un 0.3%.
El estadístico de la ONE Dong Lijuan indicó que las subidas de precios se deben tanto a la recuperación de la demanda como al impacto de las altas temperaturas y las lluvias en ciertas partes del país, factor este último que elevó los precios de las verduras o los huevos, responsables de un 40% del repunte total del IPC.
La inflación subyacente, medidor que excluye precios alimentarios y energéticos por su volatilidad, experimentó un aumento del 0.4% interanual en julio.
La ONE también hizo público este miércoles el índice de precios a la producción (IPP), que mide los precios industriales y que registró, por segundo mes consecutivo, una bajada interanual del 0.8%.
Este indicador también queda ligeramente por encima de las expectativas de los expertos, que apuntaban a que el descenso se profundizaría hasta un 0.9%.
En cualquier caso, tras 22 meses consecutivos de bajadas, la ONE sigue apuntando a un entorno marcado por una “demanda insuficiente” o la tendencia bajista en el precio de algunas materias primas a nivel internacional.