El presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, se reunió con la cúpula de la Cancillería y expresó su preocupación con la decisión del régimen venezolano de revocar la autorización que tenía Brasil para custodiar las sedes diplomáticas de Argentina, informaron fuentes oficiales.
El mandatario abordó la situación con la secretaria general del Ministerio de Relaciones Exteriores, Maria Laura da Rocha, en un encuentro en el que participó a distancia el canciller Mauro Vieira, quien está de visita oficial en Omán.
Fuentes diplomáticas brasileñas indicaron a EFE que Lula manifestó su preocupación con la postura de Venezuela, que revocó la autorización que tenía Brasil para velar por los intereses argentinos en Caracas, incluyendo la custodia de su embajada y del resto de sus sedes diplomáticas.
En la inusual reunión de este domingo (8), el líder progresista también ratificó la posición de Brasil de que “permanecerá con la custodia y defensa de los intereses argentinos hasta que Argentina designe a otro Estado” válido para el régimen de Nicolás Maduro.
La Embajada de Argentina en Caracas acoge en estos momentos a 6 opositores que pidieron asilo, después de que la Fiscalía los acusara de conspiración y traición a la patria, entre otros delitos.
El asesor de Asuntos Internacionales de Lula, el excanciller Celso Amorim, también dijo a la prensa local que le parece “muy extraña” la actitud de Venezuela, pues el derecho internacional ampara “la protección de los intereses” de los países.
“A mí es algo que me llama la atención y me choca mucho”, confesó.
Lula no ha reconocido ni la victoria de Maduro, ni la del líder opositor Edmundo González, respaldada por parte de la comunidad internacional y quien este domingo (8) aterrizó en España para pedir asilo, después de que la Fiscalía venezolana ordenase su prisión por conspiración, entre otros delitos.