El presidente de la Reserva Federal (Fed), Jerome Powell, aseguró que en la toma de decisiones sobre el recorte de los tipos las elecciones presidenciales del próximo 5 de noviembre no son una variable a tener en cuenta.
“Nuestro trabajo es apoyar la economía en nombre de los estadounidenses. Si acertamos, esto beneficiará a la población de forma significativa. Nos concentramos en esto”, dijo en la rueda de prensa posterior a que el regulador anunciara por primera vez en 4 años y medio una bajada de los tipos, en esta ocasión de medio punto.
Antes de los comicios presidenciales, el Comité Federal de Mercado Abierto (FOMC, en inglés), encargado de tomar esa decisión, no tiene programada ninguna reunión más: éstas serán el 6 y 7 de noviembre, justo después de las mismas, y el 17 y 18 de diciembre.
El de este martes (17) y miércoles (18) era por tanto el último encuentro antes de que la vicepresidenta estadounidense y candidata demócrata, Kamala Harris, y el exmandatario republicano Donald Trump (2017-2021) se enfrenten en las urnas.
Pero Powell dejó claro que esa fecha decisiva no influyó en el paso tomado: “No aplicamos ningún otro filtro”, indicó ante los medios.
Con la bajada de este miércoles (18), la tasa de referencia de los tipos de interés se ha quedado en un rango del 4.75% al 5%.
El presidente de la Fed subrayó que quisieron ser pacientes hasta tener la certeza de que los datos económicos y laborales iban hacia la dirección apropiada.
Según apuntan los economistas, al recortar las tasas antes de las elecciones se corre el riesgo de que se ponga en duda la necesaria independencia de la Fed.