El ciclón John se degradó este martes a baja presión remanente tras tocar tierra el lunes como huracán categoría 3 en Guerrero, que reporta al menos 2 muertos por el fenómeno.
Aun así, se formó una zona de baja presión asociada con los remanentes del fenómeno que tiene un 50% de probabilidad de desarrollo ciclónico en 48 horas, avisó el Servicio Meteorológico Nacional (SMN).
“John se ha degradado a baja presión remanente en tierra, sobre el estado de Guerrero. Sin embargo, su amplia circulación producirá lluvias intensas a puntuales extraordinarias, vientos fuertes y oleaje elevado en el sur y sureste del territorio nacional”, indicó el SMN en lo que será el último reporte sobre este fenómeno.
El ciclón sorprendió porque en un inicio el SMN solo preveía que fuese una tormenta tropical que se degradaría a depresión al tocar tierra el miércoles, pero se intensificó, aceleró y cambió de rumbo el lunes, cuando se fortaleció hasta huracán categoría 3 y golpeó la zona de la Costa Chica de Guerrero.
En el último informe, el fenómeno se ubicó a 60 kilómetros al norte de Técpan de Galeana, en Guerrero, y a 115 kilómetros al noroeste de Acapulco, en la misma entidad.
Además, mientras John se degradaba, el SMN avisó de la formación de la tormenta Helene, que pasaría como posible huracán categoría 1 el miércoles cerca de Cancún, aunque por ahora no está previsto que toque tierra en territorio mexicano.
Por el paso de John, el Gobierno mexicano ha desplegado más de 18 mil miembros de las Fuerzas Armadas y otras dependencias en la región de la Costa Chica de Guerrero, donde se reportan daños en carreteras y municipios incomunicados.
La zona afectada recibió hace casi un año, el 25 de octubre, el impacto del huracán Otis, que dejó más de 50 muertos y rompió el récord de intensificación de un ciclón en el Pacífico mexicano.