El Gobierno de Australia impuso sanciones financieras selectivas y prohibiciones de viaje a 5 altos funcionarios y ejecutivos iraníes, en respuesta al ataque con 180 misiles balísticos perpetrado el pasado 1 de octubre por Irán contra Israel.
Estas sanciones afectan a 2 directores y a un alto funcionario de la Organización de Industrias Aeroespaciales de Irán, al director del Grupo Industrial Shahid Bagheri y al director comercial del Grupo Industrial Shahid Hemmat, según un comunicado publicado hoy por la oficina de la ministra australiana de Exteriores, Penny Wong.
Al calificar el programa de misiles de Irán como “una amenaza material para la seguridad regional e internacional”, el Gobierno australiano recalcó que el ataque contra Israel el 1 de octubre aumentó el riesgo de una amplificación de la guerra en Medio Oriente.
Irán lanzó 180 misiles contra Israel en respuesta al asesinato del jefe político de la organización islámica palestina Hamas, Ismail Haniyeh, durante una visita oficial a Teherán a finales de julio.
La ofensiva iraní también fue una represalia por los asesinatos del líder del grupo terrorista chií Hizbulá, Hasán Nasrala, y de un general de la Guardia Revolucionaria en Beirut, el 27 de septiembre pasado.
El Ejecutivo de Camberra, que se une con las medidas a las sanciones anunciadas previamente contra Teherán por Estados Unidos, la Unión Europea y Reino Unido, apuntó en el comunicado que “el papel desestabilizador de Irán” también se refleja en la guerra en Ucrania, donde Rusia ha utilizado misiles iraníes.
“Seguiremos pidiendo cuentas a Irán por sus acciones imprudentes y desestabilizadoras”, dijo hoy la ministra australiana de Exteriores en un mensaje en su cuenta oficial en X.
Australia ha impuesto hasta la fecha unas 200 sanciones a Irán, que lidera la llamada alianza anti-israelí “Eje de la Resistencia”, conformada por Hizbulá, Hamas, los hutíes de Yemen y milicias iraquíes.
