Más de 150 gazatíes perdieron la vida en ataques israelíes en el enclave palestino desde el sábado 19 de octubre, unos 84 ayer y al menos otros 70, en un bombardeo en Beit Lahia (norte) que también causó más de 40 heridos.
Con esos ataques, el número de víctimas mortales desde el inicio de la guerra el pasado 7 de octubre de 2023 superó los 42,600 -la mayoría mujeres y niños- y el de heridos los 99,800, en un enclave con un sistema sanitario al borde del colapso.
Solo en Beit Lahia, al menos 73 personas murieron cuando Israel bombardeó un complejo residencial y una rotonda, según las autoridades de la Franja, en lo que el Ejército calificó como un ataque de “precision” contra miembros e infraestructura del grupo terrorista Hamas.
El Ministerio de Sanidad gazatí aumentó esa cifra a 87 víctimas entre muertos y personas desaparecidas bajo los escombros, así como más de 40 heridos, algunos de ellos en estado crítico. Estos se suman a los cerca de 500 muertos solo en el norte en las últimas 2 semanas de cerco militar.
Además de ese ataque, los hospitales del norte del enclave fueron también atacados por Israel, que rodeó con tanques el Hospital Indonesio y demolió parte de sus paredes. Los hospitales Al Awda y el de Al Yaman Al Saeed también sufrieron daños.
La artillería israelí también atacó Yabalia y sus alrededores, según la agencia palestina de noticias Wafa, coincidiendo con la demolición de edificios residenciales en explosiones controladas por tropas del Ejército.