La Secretaría de Salud del Gobierno del estado de Colima realiza acciones de control del vector del dengue, zika y chikungunya en los principales panteones de la entidad, con el objetivo de prevenir la trasmisión de estas enfermedades entre las personas que visitan a sus familiares difuntos.
Agregó que, en los panteones de 7 municipios, el personal de Vectores realiza el control larvario, que consiste en la aplicación de larvicida y de la estrategia “Lava, tapa, voltea y tira”, y la nebulización (termo nebulizador con máquina portátil) para eliminar los moscos adultos.
En la Jurisdicción Sanitaria 1 (Colima), se realiza en los panteones municipales de Colima y Villa de Álvarez, así como en el cementerio Morada de la Paz de este último municipio, se realizó el control larvario y la nebulización.
En la Jurisdicción Sanitaria 2 (Tecomán), el 30 y 31 de octubre se llevan a cabo las acciones de control larvario y la nebulización en los panteones municipales de Armería e Ixtlahuacán, así como en los panteones de Dolores y del Recuerdo, de Tecomán.
Y en la Jurisdicción Sanitaria 3 (Manzanillo), ya se realizó el control larvario y la termo-nebulización en el panteón municipal de Minatitlán y se realizan este 30 y 31 de octubre en los panteones María Teresa Escobar, El Colomo, Venustiano Carranza, Salagua, Santiago, El Chavarín, Chandiablo y Camotlán de Miraflores, de Manzanillo.
En las visitas que hará la población a los familiares difuntos, los Servicios de Salud del estado de Colima recomiendan llevar flores artificiales con la base de cemento o yeso (que no acumule agua) y revisar las plantas con base de oasis (esponja verde) que al fondo del recipiente tenga un dren para el agua de lluvia.
También sugirieron que, en caso de llevar flores naturales, que éstas estén en macetas con tierra y orificio en la parte inferior para el dren de agua; procurar que, si son floreros de cemento que contengan un dren de agua en la parte inferior, y no llevar flores o plantas acuáticas con botellas plásticas, floreros u otros objetos que acumulan agua, ya que se pueden convertir en criaderos del mosco transmisor del dengue.