La Presidenta de México, Claudia Sheinbaum, pidió “coordinación” a los países de Latinoamérica ante los planes migratorios del próximo mandatario de Estados Unidos, Donald Trump, tras una reunión el jueves de ministros y representantes de 10 países de la región.
“(Planteamos) estar en comunicación, en coordinación, para cualquier estrategia que se plantee desde el Gobierno del presidente Trump, entre los países”, declaró la mandataria en su conferencia matutina, que esta vez fue en el puerto de Acapulco.
La mandataria federal apuntó que “ayer hubo una primera reunión con distintos países” en Ciudad de México, donde estuvieron ministros, viceministros y jefes de delegación de 10 países para integrar una estrategia conjunta ante las amenazas de deportaciones masivas de Trump.
A la reunión asistieron representantes de Belice, Brasil, Colombia, Cuba, El Salvador, Guatemala, Haití, Honduras, México y Venezuela, de acuerdo con la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), y “hoy tendrán también una conferencia a distancia ya directamente los cancilleres y las cancilleres”, según Sheinbaum.
La presidenta destacó que ya comenzaron las “conversaciones para poder fortalecer la estrategia, por un lado, para evitar la migración a través de la cooperación para el desarrollo”.
“Y nuestra insistencia con el Gobierno de EUA y de colaboración con todos los Gobiernos de Centroamérica y Suramérica para que pueda atenderse en su lugar de origen a las personas y que puedan tener acceso al empleo, a una vida segura, digna y justa en sus lugares de origen para evitar la migración”, agregó.
En el país preocupan las deportaciones masivas prometidas por Trump porque cerca de la mitad de los 11 millones de indocumentados en Estados Unidos son mexicanos y casi el 4% del Producto Interno Bruto (PIB) de México lo representan sus remesas, que en 2024 habrían alcanzado un récord estimado de 65 mil millones de dólares.
Por ello, Sheinbaum ha insistido en que Estados Unidos debe deportar a los migrantes de forma directa a sus países de origen, en lugar de expulsarlos a todos a México.
La jefa de Estado sostuvo que su iniciativa “fue muy bien recibida” desde que la planteó a su homóloga de Honduras, Xiomara Castro, presidenta pro tempore de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac).
Por otro lado, pidió esperar a que Trump asuma el cargo el próximo lunes para ver cuáles serán sus acciones definitivas.
“Nuestro objetivo es que una vez que entre el presidente Trump pueda haber un diálogo de alto nivel con servidores públicos, secretarios y secretarias del Gobierno de México y el Gobierno de los Estados Unidos y que, a partir de ahí, definamos las estrategias conjuntas”, señaló.