La Pinacoteca Universitaria fue escenario de la presentación del libro La ópera y sus gastos secretos: Su producción en México durante la primera mitad del siglo XIX, una obra de la investigadora y musicóloga Áurea Maya Alcántara. El evento reunió a estudiantes, docentes, melómanos y personalidades destacadas, como el Rector de la Universidad de Colima, Christian Torres Ortiz Zermeño y su esposa, Blanca Liliana Díaz Vázquez, presidenta del Voluntariado Universitario.
La obra, que profundiza en los intrincados mecanismos de financiamiento y producción operística en un México independiente pero convulso, fue descrita como una investigación pionera en su campo. Durante la ceremonia, la historiadora Olivia Moreno Gamboa, doctora en Historia por la UNAM, destacó que este exhaustivo trabajo de archivo consagra a Áurea Maya como “una de las grandes historiadoras de la ópera en México y de la cultura musical del siglo XIX”.
Un retrato del México independiente desde el palco de un teatro
Moreno Gamboa dijo que el libro permite al lector adentrarse en las primeras décadas del México independiente, relatadas desde los palcos teatrales donde se escenificaban las primeras óperas en el país. Además de explorar las representaciones artísticas, el libro ofrece un contexto más amplio, mostrando cómo las rivalidades políticas y los cambios sociales de la época influyeron en la producción cultural.
“Sabemos que, en el siglo XIX, la ópera fue el espectáculo preferido de las élites y las clases medias en el mundo occidental, y México no fue la excepción”, afirmó Moreno. Sin embargo, dijo, la obra de Áurea Maya va más allá, respondiendo preguntas sobre cómo se logró producir un espectáculo tan complejo en un país con limitaciones económicas y políticas tras su independencia de España.
La historiadora señaló que, pese a la precariedad económica y los conflictos políticos que marcaban el periodo, la ópera se convirtió en una prioridad cultural para los políticos de todas las corrientes: federalistas, centralistas, liberales y conservadores. “La ópera era vista no solo como entretenimiento, sino como un discurso articulador que podía unir a los mexicanos y conectar al país con Europa, reforzando su identidad como nación civilizada”.
Financiamiento y el rol del Estado
Un aspecto revelador del libro es el análisis del financiamiento estatal que permitió la proliferación de la ópera en México durante el siglo XIX. La autora documenta cómo los gobiernos de la época destinaron recursos a través de las partidas de gastos secretos de las secretarías de Relaciones y Gobernación, un detalle que da nombre a la obra.
Finalmente, Moreno Gamboa destacó la meticulosidad de la autora al reconstruir temporadas operísticas completas, detallando las obras presentadas, las fechas, los sueldos de los músicos y la duración de las funciones.
La ópera como fenómeno social y cultural
Rogelio Álvarez Meneses, pianista e investigador de la UdeC, añadió que este libro es una contribución fundamental para entender el impacto de la ópera en la vida pública del siglo XIX. “La ópera no solo unía a personas de distintas clases sociales, sino que también colocaba a México en sincronía con las corrientes culturales de Europa. En los teatros de la década de 1830, ya se respiraba el romanticismo”, comentó.
Álvarez destacó cómo la ópera alcanzó niveles de popularidad masiva, con teatros de aforos de más de mil personas y funciones constantes, convirtiéndose en un tema de conversación y hasta en un motivo de facciones entre los sectores sociales. Citando un periódico de 1841, el investigador recordó que los teatros eran vistos como “termómetros del grado de ilustración de los pueblos” y como espacios dignos de protección gubernamental.
El origen del proyecto
Al tomar la palabra, Áurea Maya Alcántara compartió que la semilla de este libro se plantó en 2014, cuando participó en el libro colectivo Los papeles para Euterpe con un texto sobre la ópera en el siglo XIX mexicano. Durante su intervención, relató que las reflexiones compartidas en un seminario dirigido por Laura Suárez de la Torre la llevaron a cuestionarse si la ópera era simplemente entretenimiento o si tenía un carácter más profundo en la historia del país.
“Este libro muestra cómo se conformó el gusto del público mexicano por la ópera y las connotaciones políticas que tuvo. No fue fácil llevar a cabo esta investigación, pero el esfuerzo valió la pena, ya que pude acceder a archivos nunca antes explorados desde la musicología”, explicó la autora.
El evento culminó con la interpretación de arias de ópera emblemáticas del siglo XIX mexicano, como “Una furtiva lágrima”, “La Favorita” y “La hija del regimiento”, de Gaetano Donizetti, así como “Tu mirada”, de Fernando Domec. Las piezas estuvieron a cargo de la soprano Genie Ceceña, del tenor Enrique Mejía y del pianista Rogelio Álvarez Meneses, quienes transportaron a los asistentes a la atmósfera operística de la época.
Al término de la presentación, el Rector Christian Torres Ortiz Zermeño adquirió varios ejemplares del libro para los estudiantes del Instituto Universitario de Bellas Artes (IUBA), quienes también estuvieron presentes en esta celebración cultural.