En la Escuela Secundaria “Adalberto Torres Gaytán”, en la cabecera municipal de Tecomán, se llevó a cabo un encuentro con Madres Buscadoras de personas reportadas como desaparecidas. Allí, las protagonistas motivaron a la comunidad a reflexionar sobre el papel fundamental de la educación en la prevención de desapariciones y la construcción de una cultura de paz.
La directora del plantel, Isabel Martínez Pérez, destacó la necesidad urgente de fortalecer el sistema educativo con herramientas y recursos que permitan un acompañamiento integral a los estudiantes, particularmente en el ámbito socioemocional.
Martínez Pérez subrayó que la prevención de desapariciones y la promoción de una sociedad pacífica deben comenzar en el núcleo familiar, pero requieren también el compromiso de las instituciones educativas. “Las familias disfuncionales se convierten, de alguna manera, en un caldo de cultivo para estas problemáticas. Necesitamos que los padres asuman una crianza responsable y cuiden a sus hijos incluso en el trayecto a la escuela. Cuando detectamos conductas inapropiadas en la institución y los padres se desentienden, estamos ante señales de alerta”, enfatizó.
La directora también señaló las carencias del sistema educativo para atender la salud emocional de las y los estudiantes. “Las escuelas no cuentan con psicólogos ni suficiente personal especializado en salud mental. Aunque tenemos asignaturas de tutoría enfocadas en el bienestar socioemocional, carecemos de docentes para impartirlas. El sistema educativo debe actuar, porque los niños necesitan educación socioemocional”, afirmó. Además, mencionó que su escuela, como muchas otras, enfrenta la falta de maestros en ambos turnos, lo que complica la formación integral de los alumnos.
Durante el evento, las Madres Buscadoras sensibilizaron a madres y padres y estudiantes sobre la gravedad del problema de las desapariciones. Josefina Jaramillo, madre de familia, valoró la apertura de la institución para abordar ese tema: “Yo no he pasado por una situación así, pero ahora sabemos que existen comisiones de búsqueda y a dónde acudir en caso de necesitar ayuda”.
Adela Infante, otra madre de familia, destacó la relevancia de esas pláticas para la prevención: “A veces no le damos la importancia que deberíamos a estar al pendiente de nuestros hijos. Nos enfocamos en responsabilizar al gobierno, pero también es nuestro deber supervisarlos, saber con quién se relacionan y brindarles el apoyo que necesitan”.
Al concluir, directivos, docentes y padres coincidieron en la importancia de fortalecer el sistema educativo con personal capacitado y programas que refuercen la formación socioemocional de los estudiantes, como un camino esencial para evitar la violencia y fomentar una cultura de paz.