Israel lanzó este viernes una serie de bombardeos contra el sur del Líbano y atacó los suburbios de Beirut por primera vez en 4 meses de alto el fuego, en respuesta a un previo lanzamiento de 2 cohetes desde el territorio libanés del que ningún grupo ha asumido la autoría.
Tras detectar el disparo de 2 proyectiles hacia la Alta Galilea, uno de los cuales fue derribado, el Ejército israelí bombardeó a lo largo del viernes diversos puntos del país vecino, causando al menos 5 muertos y 18 heridos, entre ellos varios niños, según el Ministerio de Salud Pública del Líbano.
Además, por primera vez desde que el pasado 27 de noviembre entrara en vigor un alto el fuego entre las partes, Israel emitió una orden de evacuación para el extrarradio beirutí del Dahye, donde bombardeó un edificio en el que asegura había aviones no tripulados pertenecientes al grupo chií libanés Hizbulá.
“La operación de hoy de las Fuerzas de Defensa de Israel en el Líbano, dirigida contra las instalaciones de almacenamiento de drones ofensivos de Hizbulá ubicadas en edificios residenciales, es una respuesta al ataque contra Israel y sus ciudadanos”, aseguró el Ministerio de Exteriores israelí en un comunicado.
Primer bombardeo en 4 meses
Las autoridades libanesas no han informado de víctimas en el ataque contra los suburbios capitalinos, muy castigados durante el conflicto del pasado año y donde cundió el pánico tras el aviso israelí para evacuar, específicamente, una zona del barrio de Hadath.
El impacto de los misiles, que se pudo escuchar en toda la ciudad, dejó un gran boquete en el suelo y redujo a escombros al menos un inmueble en un punto rodeado de edificios residenciales de muchas alturas, según pudo constatar EFE.
El Ejército libanés denunció en un comunicado la intensificación de los ataques israelíes ocurrida en las últimas horas, aunque desde la implementación del cese de hostilidades hace 4 meses, sus cazas y drones han seguido perpetrando acciones de forma esporádica.
“Los ataques tuvieron como objetivo varias áreas del sur, hasta Beirut, en una violación flagrante y repetida de la soberanía del Líbano y de la seguridad de sus ciudadanos; un desafío de la ley internacional y un incumplimiento evidente del acuerdo de alto el fuego”, apuntó la institución castrense libanesa.
Según la nota, sus filas también han podido identificar el punto desde el que fueron lanzados los cohetes contra la Alta Galilea y que identificaron como Qaqaiyat al Jisr, “al norte del río Litani”.
El acuerdo de alto el fuego con Israel establece que no puede haber armas ajenas al Estado libanés más abajo del Litani, en la franja que va desde este hasta la frontera de facto entre ambos países, como también estipula la resolución del Consejo de Seguridad de la ONU que puso fin a la anterior guerra de 2006.
Avisos y temores
Ninguna formación ha reclamado la autoría del ataque con cohetes, el segundo en una semana, si bien Hizbulá ya se desvinculó de otro ocurrido el pasado sábado.
El primer ministro libanés, Nawaf Salam, pidió medidas “rápidas” para determinar quién disparó los proyectiles a primera hora de este viernes, un acto que considera “amenaza la seguridad y estabilidad del Líbano”, según un comunicado emitido por la presidencia del Gabinete de Ministros.
Del otro lado de la frontera, su homólogo israelí, Benjamín Netanyahu, advirtió que seguirán “atacando cualquier punto del Líbano, ante cualquier amenaza al Estado de Israel” y defendió que las acciones de este viernes han servido de “recordatorio” para aquellos que aún no hayan “asimilado la nueva situación” en ese país.
Los ataques han levantado miedos entre la población del Dahye y la clase política libanesa a que se reavive el conflicto finalizado hace cuatro meses.
“Este es un periodo crítico para el Líbano y la región, cualquier intercambio de fuego es demasiado. Un regreso a un conflicto más amplio en el Líbano sería devastador para los civiles a ambos lados de la Línea Azul y debe evitarse a toda costa”, zanjó la coordinadora especial de la ONU para el Líbano, Jeanine Hennis-Plasschaert.