La saturación del Panteón de Dolores ha dejado al municipio de Tecomán sin espacios disponibles para sepultar a sus difuntos, una situación que, de acuerdo con el dirigente municipal del PRI, Jonathan Castillo, representa una “grave omisión” de las autoridades locales al no haber previsto ni gestionado la construcción de un nuevo cementerio.
“El panteón ya no tiene capacidad, y lo más alarmante es que no existe un proyecto visible, ni una alternativa clara para resolver esta necesidad urgente de la población”, expresó Castillo, quien calificó el problema como una falta de respeto hacia las familias tecomenses y hacia sus tradiciones.
El dirigente partidista recordó que tanto la Ley del Estado Libre y Soberano de Colima como los reglamentos municipales obligan a los gobiernos locales a garantizar la prestación adecuada de los servicios públicos, incluyendo la administración y habilitación de panteones. “Es una obligación legal y moral que las autoridades no han querido asumir”, enfatizó.
Castillo señaló que la falta de información por parte del ayuntamiento ha generado incertidumbre entre los ciudadanos, quienes se encuentran desamparados ante la imposibilidad de contar con un lugar adecuado para dar sepultura a sus seres queridos.
“La población merece claridad, merece soluciones. Pero hasta ahora, lo que vemos es indiferencia institucional”, afirmó, al tiempo que urgió al gobierno municipal a actuar con prontitud, transparencia y compromiso.
El dirigente del PRI insistió en que la construcción de un nuevo panteón debe ser una prioridad en la agenda pública local, y advirtió que ese espacio debe cumplir con criterios de calidad, dignidad y accesibilidad.
“La ciudadanía merece un trato digno en los momentos más dolorosos. Es momento de que las autoridades asuman su responsabilidad y den la cara”, concluyó.
