Argentina registró en mayo pasado un déficit primario de 247,651 millones de pesos, lo que implicó un aumento del 52.5% respecto al resultado negativo del mismo mes de 2022, informaron fuentes oficiales.
De acuerdo con datos del Ministerio de Economía, en el quinto mes del año se registró un déficit financiero por 631,072 millones de pesos, con un aumento interanual del 160.3%.
En un comunicado, el Ministerio de Economía argentino atribuyó este resultado a los efectos de la sequía que padeció el país en los últimos meses, con una fuerte caída en la recaudación de tributos por exportación de productos agroalimentarios.
“Una vez más, se evidenció una profundización del impacto de la sequía en la recaudación asociada a los derechos de exportación que percibe el Estado nacional, producto de la sequía”, señala el comunicado.
Según el acuerdo sellado en marzo de 2022 por Argentina y el Fondo Monetario Internacional (FMI), el país suramericano debe bajar este año su déficit fiscal primario al equivalente del 1.9% del PIB, desde el 2.4% del PIB en 2022.