El presidente serbio, Aleksandar Vucic, aseguró este jueves, tras una reunión de alto rango entre Serbia y Kosovo en Bruselas, que aún no existe una vía clara para normalizar las relaciones mutuas y responsabilizó de ello a la parte kosovar.
“Serbia ha aceptado una propuesta de compromiso de la Unión Europea (UE). (El primer ministro kosovar, Albin) Kurti no quería aceptarla, y la reunión ha terminado”, aseguró Vucic en declaraciones a la prensa serbia desde Bruselas, sin dar más detalles.
El jefe de la diplomacia europea, Josep Borrell, y el mediador comunitario para el diálogo entre Kosovo y Serbia, Miroslav Lajcak, se reunieron con Vucic y Kurti con el objetivo de eliminar las tensiones y para poner en marcha los acuerdos de normalización pactados en marzo pasado, con el apoyo de Estados Unidos.
Vucic explicó que “lo esencial” es que Kurti se niega a formar una asociación de los municipios de mayoría serbia en Kosovo, un tipo de autonomía para la población serbia, minoría en el territorio, acordada hace 10 años.
También acusó a Kurti de constantes escaladas y de un gran aumento de incidentes e intimidaciones contra la población serbia.
“Mi postura es que la paz es del mejor y mayor interés tanto de los serbios como de los albaneses, y que es algo con que nadie debe jugar”, indicó.
Según el portal de noticias Koha, Kurti dijo tras la reunión que Kosovo no acepta que la creación de la asociación de los municipios de mayoría serbia sea una condición para la normalización.
“No estamos en abril de 2013”, dijo Kurti, en referencia a la fecha en que fue firmado el acuerdo sobre la asociación.
Insistió en que los puntos logrados en el nuevo acuerdo europeo de normalización, de marzo pasado, del que dijo que supone de hecho el reconocimiento de la independencia de Kosovo, deben ser aplicados por igual sin preferencias.
“No es posible (…) seleccionar uno, convertirlo en lo esencial y en requisito previo. No he aceptado tal condición”, declaró Kurti a la prensa.
Por otra parte, acusó a Lajcak de “violar su cargo de facilitador y mediador” por apoyar esa “condición” serbia.
Las tensiones en el norte de Kosovo persisten desde finales de mayo por el rechazo de los serbokosovares a aceptar alcaldes de la mayoría albanokosovar en los 4 municipios norteños kosovares poblados por serbios, que boicotearon unas elecciones en abril.
La UE pidió a Pristina pasos para reducir las tensiones, como retirar la policía especial de los Ayuntamientos, y preparar nuevas elecciones en la zona.
La antigua provincia serbia de Kosovo, de mayoría albanesa, proclamó su independencia en 2008, que Serbia no reconoce.