La supervisora de Asistentes Médicas del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Colima, Elba Serrano Chávez, hizo un llamado a las mujeres que presentan síntomas de depresión postparto a acudir a atención médica si se prolongan por más de 2 semanas, pues podrían requerir abordaje profesional especializado.
“Si las actividades cotidianas de la persona empiezan a mermar, o si, por ejemplo, ella disfrutaba de ir al cine y ya no, y esto le dura más de 2 semanas, hay que poner atención y pensar que algo está pasando. No es normal”, advirtió la funcionaria del IMSS.
Serrano explicó que cuando una paciente muestra signos de depresión postparto, el médico familiar realiza un primer abordaje y, de ser necesario, la canaliza al módulo de PrevenIMSS, donde se le aplica un tamizaje por parte del personal de enfermería, capacitado específicamente para esta tarea. Subrayó que aplicar ese tipo de cuestionarios implica una gran responsabilidad y debe hacerse con sensibilidad y formación profesional.
Destacó que en las unidades médicas del IMSS existen horarios específicos para la atención de pacientes consideradas vulnerables o prioritarias. En caso de detectar un cuadro depresivo, el médico puede canalizar a la paciente con el área de psicología o incluso a un segundo o tercer nivel de atención, según lo requiera la situación.
La supervisora señaló que es normal que, tras el parto, la tristeza o el llanto puedan manifestarse durante algunos días. Sin embargo, si estas manifestaciones se extienden más allá de dos semanas, es fundamental acudir a un servicio de salud. “La enfermera no da un diagnóstico, solo aplica el tamizaje. Es el médico quien determina el abordaje y el nivel de atención requerido”, puntualizó.
Uno de los efectos más delicados de la depresión postparto, dijo, es que puede afectar el vínculo entre la madre y su bebé. “Hay mamás que incluso no aceptan ni ver a su hija o hijo”, alertó.
Finalmente, Serrano Chávez compartió que, de acuerdo con datos de la Organización Mundial de la Salud, entre un 50% y un 70% de las mujeres que acaban de dar a luz presentan algún grado de depresión postparto. No obstante, en Colima la cifra podría estar subestimada, pues muchas mujeres no acuden a atención médica. “La paciente lo ve como algo común y no busca ayuda. Por eso, de repente tenemos cifras sesgadas, porque la mujer lo vive y lo sufre en casa, sin una red de apoyo”, concluyó.

