Luego de que el Inegi dio a conocer el Informe de Defunciones por Homicidio 2024, en el que Colima ocupa el primer lugar como la entidad federativa con más asesinatos intencionales por cada 100 mil habitantes, el dirigente estatal del PRI, Enrique Rojas Orozco, señaló “que desde que Morena llegó al Gobierno del estado, Colima se convirtió en el primer lugar en homicidios dolosos y no hemos podido revertir ese índice”.
Agregó que ello “es grave porque no son sólo números: son familias que pierden a un ser querido, niñas y niños que se quedan sin su mamá o sin su papá. Es muy triste ver a las familias llorar por ser víctimas de la inseguridad”.
El presidente del Comité Directivo Estatal del PRI en Colima calificó como lamentable que ni la Fiscalía General del Estado ni la Secretaría de Seguridad Pública hayan encontrado la forma de resolver esa problemática.
En respuesta a las declaraciones que afirman que se ha avanzado en el combate a la inseguridad, Rojas Orozco consideró que no corresponden con la realidad: “Hay que explicarles que no se avanza si se tienen más muertos por homicidio doloso. Eso es un retroceso. Ojalá el Fiscal entendiera que más muertos es retroceso, no es avanzar. Colima quiere paz y tranquilidad, y no están teniendo la capacidad de brindársela”.
Agregó que la violencia que se vive en Colima afecta de forma profunda a las familias, no solo por el impacto emocional y social del homicidio de un ser querido, sino también por el alto grado de impunidad: “De todos los homicidios dolosos, rarísima vez pueden dar cuenta de que detuvieron a alguien”.
Finalmente, el líder priista consideró que cuando las y los ciudadanos se organizan para publicar desplegados exigiendo justicia, como ocurrió el pasado con el asesinato de Arturo Fabián Galván y Rosa María Magdalena Frías Medina, se trata de una muestra clara de la desesperación que vive la población ante la falta de resultados de las autoridades.

