Un sismo de magnitud 5.5 sacudió una amplia zona del noreste de Japón, donde se sintió con fuerza, sin que se activara la alerta de tsunami ni hayan constado por el momento daños derivados del movimiento.
El seísmo tuvo lugar a las 4:33 de la madrugada (hora local) y tuvo su epicentro a 60 kilómetros de profundidad bajo el lecho marino frente a la costa de la prefectura de Miyagi, al noreste del país, según informó la Agencia Meteorológica de Japón (JMA).
El temblor alcanzó el nivel 4 en la escala sísmica nipona (de 7 niveles y centrada en medir la agitación sobre la superficie y los potenciales daños) y el mismo nivel en las prefecturas colindantes de Iwate y Fukushima.
No se detectó ninguna anomalía en la planta nuclear de Onagawa, en la prefectura de Miyagi, según dijo el operador.
Japón se asienta sobre el llamado Anillo de Fuego, una de las zonas sísmicas más activas del Mundo, y sufre terremotos con relativa frecuencia, por lo que sus infraestructuras están especialmente diseñadas para aguantar los temblores.