El presidente de Irán, Ebrahim Raisi, centró su discurso ante la Asamblea General de la ONU en la defensa del islam y la familia tradicional, y dijo que los ataques a los roles tradicionales de género deberían considerarse “crímenes de guerra”.
“Estas son palabras divinas: madre, padre. Son palabras y conceptos naturales”, dijo el político ultraconservador ante los asistentes a la apertura del 78 periodo de sesiones de la Asamblea General, que se celebra estos días en Nueva York.
Durante una jornada marcada por los llamamientos internacionales a la paz en Ucrania, y en la que intervino en persona el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, Raisi dijo que los crímenes contra la humanidad no son solo “la ocupación de territorios y la opresión de la gente y los asesinatos masivos”.
“Un ataque concertado contra la familia en sí también es un crimen contra la humanidad”, dijo el iraní, para quien “la santidad del matrimonio entre un hombre y una mujer es una verdad inherente que debe aceptarse por el mundo entero”.
Poco antes, el mandatario, que habló durante más de media hora, sostenía en alto una copia del Corán y defendía las enseñanzas del libro sagrado del islam.
También criticó la prohibición del velo en las escuelas y la quema del Corán en manifestaciones, y dijo que “la islamofobia y el apartheid cultural son evidentes en Occidente”, pidiendo a la ONU que tenga un mayor papel en la defensa de las religiones.
Raisi continuó su discurso criticando a los países occidentales y a su “arrogancia”, y defendió la cercanía de un nuevo orden mundial más igualitario.
El iraní coincidió así con las tesis de Rusia, que suele enmarcar su pugna con los países industrializados en una confrontación entre “el Sur global” -en el que se incluyen- y las potencias coloniales.
Se refirió en particular a Estados Unidos, al que acusó de tener “la cárcel de mujeres, y por lo tanto de madres, más grande del mundo”, y de falsear las noticias sobre su país para dar una imagen “ilegítima” de Irán.
“Lo repito, ellos son el pasado. Nosotros somos el futuro”, llegó a decir Raisi.
El mandatario también acusó a EUA de azuzar las llamas del conflicto en Ucrania para debilitar Europa, “su plan a largo plazo”, y dijo que su país apoya cualquier iniciativa política para resolver la situación.
Por último, Raisi aseguró que Irán no busca conseguir armas nucleares, pero que no renunciará a su programa nuclear pacífico, y pidió que Estados Unidos explique con datos su salida del pacto nuclear de 2015, que el entonces presidente estadounidense Donald Trump (2017-2021) abandonó de manera unilateral.
Desde entonces, Irán ha estado enriqueciendo uranio a niveles muy por encima de los contemplados en el pacto, que la Unión Europea trata de reactivar, siempre con la justificación de que las actividades responden a su programa pacífico de desarrollo energético y negando que busque construir un arma nuclear.
