Reporta el Instituto de Estudios para el Desarrollo y la Paz (Indepaz) el asesinato de Josué Valencia Cuero, joven líder social de 17 años, ocurrido en Buenaventura, principal puerto del Pacífico colombiano. El crimen se registró cuando el joven caminaba por una calle y fue atacado a tiros desde un vehículo. Pese a recibir auxilio, murió en el lugar de los hechos.
Josué Valencia, además de ser estudiante de Ingeniería en Sistemas en la Universidad del Pacífico, era reconocido por su labor comunitaria. Participaba en la escuela de formación de liderazgos Siempreviva, impulsaba la educación y el deporte, y era futbolista activo.
Con este crimen, Indepaz contabiliza 117 defensores de derechos humanos asesinados en Colombia en lo que va del año. El caso refleja el alarmante nivel de violencia que enfrentan líderes comunitarios, en particular en regiones como el Valle del Cauca y el suroeste del país, donde operan disidencias de las FARC, el ELN y otros grupos armados ilegales, quienes disputan el control de rutas del narcotráfico y actividades como la minería ilegal.
La Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos en Colombia advirtió recientemente que los asesinatos de líderes podrían superar los 191 casos registrados en 2024. Entre las víctimas más frecuentes se encuentran miembros de juntas de acción comunal, defensores de territorios, de niñez, pueblos indígenas y comunidades campesinas.

