El Fondo Monetario Internacional (FMI) volvió a recordar a Argentina que es “fundamental” que mantenga los compromisos adquiridos en el acuerdo de refinanciamiento de su deuda y haya una “sólida” implantación de las medidas que recoge.
El Fondo incluye este mensaje en su informe de perspectivas para Latinoamérica, publicado este viernes, 9 días antes de las elecciones presidenciales en el país, y en el que calcula que la economía argentina caerá este año el 2.5% aunque volverá a crecer en 2024, un 2.8%.
La incertidumbre relacionada con el proceso electoral argentino es uno de los factores de riesgo a la baja apuntados en este informe, que también advierte de la vulnerabilidad de la economía ante los factores externos y la “frágil” situación económica y social.
En una entrevista con EFE, el director del Departamento del Hemisferio Occidental del FMI, Rodrigo Valdés, explicó que el programa de refinanciación de deuda ha tratado de adaptarse lo más posible a las circunstancias que ha vivido el país, como por ejemplo la fuerte sequía que ha provocado la caída económica de este año.
Pero tras este ejercicio, auguró, hay “buenas noticias porque la sequía debería revertirse” y también porque hay algunos proyectos en los sectores de la energía o en los minerales que “empiezan a madurar”.
“Sin duda estamos en un estado muy de flujo, cambiante, por la situación de las elecciones, y estamos esperando para poder conversar con los equipos técnicos, que se vayan estableciendo para poder trabajar juntos, porque nos interesa mucho que Argentina tenga estabilidad, tenga crecimiento”, añadió.
Valdés declinó opinar sobre el “plan platita”, como se llama a las medidas económicas recientemente tomadas por el actual ministro de Economía y candidato oficialista a las presidenciales Sergio Massa, que han supuesto un aumento del gasto público.
Sí recordó que el FMI ya se ha manifestado por estas medidas y señaló que las medidas que ha tomado el país después de la revisión con el Fondo “más bien” llevan “desafíos al país”.
Recientemente, la portavoz del FMI, Julie Kozack, dijo que estas medidas podrían hacer necesarias acciones “compensatorias” para tratar de fortalecer la estabilidad y salvaguardar los objetivos del programa de refinanciamiento.
En la entrevista, Valdés tampoco quiso aventurar cuándo tendrá lugar la próxima revisión del programa y si será en noviembre, cuando corresponde, o más adelante, una vez que se haya conformado el nuevo gobierno, que arranca el 10 de diciembre.
