La ministra belga de Interior, Annelies Verlinden, dijo este martes que la investigación del atentado de Bruselas, en el que perdieron la vida este lunes 2 seguidores de la selección de futbol de Suecia, no puede confirmar aún que el autor, un tunecino abatido hoy por la policía, “haya actuado solo”.
“No podemos confirmar que el autor haya actuado solo”, dijo Verlinden al medio VTM Nieuws al señalar que “es importante que no se descarte ninguna vía demasiado rápido”.
La Fiscalía Federal “está haciendo todo lo posible para investigar todos los escenarios posibles” y “mientras no haya aclaraciones, no se descartará ninguna vía”, recalcó la ministra.
La Fiscalía de Bruselas, encargada de la investigación, está interrogando a la mujer del autor del atentado, según la prensa local, que fue abatido a primera hora de esta mañana por la policía cerca del edificio que figuraba como su lugar de residencia.
La operación policial se llevó a cabo en la plaza Eugène Verboekhoven, apodada “la jaula del oso”, en la comuna de Schaerbeek.
“Poco antes de las 8 de la mañana, un testigo informó a la policía de Bruselas que había visto al presunto autor del ataque en un establecimiento de bebidas en Schaerbeek. La policía acudió al lugar. Durante la intervención, la policía disparó y el sospechoso fue abatido”, explicó la Fiscalía en un comunicado.
Añadió que “los servicios de emergencia, al llegar al lugar, intentaron reanimar al sospechoso. Fue trasladado al hospital donde fue declarado muerto a las 9:38 a.m”, unas 14 horas después de que matara a tiros a 2 seguidores de la selección sueca y dejase herido a un tercero en otro lugar céntrico de Bruselas.
En el café en el que fue abatido “se encontró un arma y una bolsa con ropa”, dijo la Fiscalía, que por el momento no facilitará más información “por el interés de la investigación” en curso.
La Fiscalía investiga la posibilidad de que el sospechoso actuara con cómplices.
Según los primeros elementos de la investigación, el presunto autor Abdesalem L. es un tunecino de 45 años, que vive en Bruselas en la comuna de Schaerbeek de forma ilegal, ya que su solicitud de asilo en Bélgica presentada en noviembre de 2019 fue denegada un año después.
Expulsado del municipio en 2021, nunca pudo recibir su orden de abandonar el territorio.
“La policía lo conocía por trata de personas, residencia ilegal y poner en peligro la seguridad del Estado”, afirmó hoy el ministro de Justicia, Vincent Van Quickenborne, en una rueda de prensa.
El ministro indicó que un servicio de policía extranjero, que no precisó, había informado en 2016 de que Abdesalem L. tenía un perfil radical y podría ser un “candidato” a la yihad.
Al parecer, el hombre había amenazado recientemente a un residente de un centro de asilo en Bruselas, que informó a la policía de que Abdesalem L. sería conocido por actos de terrorismo en Túnez.
Pero la información resultó ser falsa, ya que Abdesalem L. sólo es conocido en su país de origen por delitos comunes, dijo el ministro.
“El sospechoso no estaba en la lista OCAD (de sospechosos de terrorismo) porque no era conocido por delitos terroristas en nuestras bases de datos”, subrayó la ministra de Interior, Annelies Verlinden, en Radio 1.
En una rueda de prensa en Estocolmo, el primer ministro sueco, Ulf Kristersson, señaló que ha recibido información de que el presunto autor permaneció ocasionalmente en Suecia, pero dijo que la policía sueca no le conocía.
La alcaldesa de Schaerbeek, Cécile Jodogne, dijo hoy a la televisión RTBF que “el hombre asistió a una mezquita de la que fue excluido hace algún tiempo por comentarios radicales”.
Según explicaciones de la Fiscalía federal, el atacante, que viajaba en una scooter, siguió a última hora de la tarde de ayer a unos fans de futbol suecos que subieron a un taxi. Luego abrió fuego contra estas personas cuando bajaban del vehículo, en el cruce de la plaza Sainctelette y el bulevar du Ninième de Ligne.
Una de las víctimas fallecidas es sueca, mientras que la segunda es de origen sueco pero residía en Suiza. La tercera víctima, que resultó gravemente herida, también es de origen sueco, según el fiscal federal Frédéric Van Leeuw.
