Julio Martínez de la Rosa, delegado del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), informó que se vigilará que en la reconstrucción de las estructuras históricas que sufrieron daños por las intensas lluvias que dejó el huracán Lidia, se cumpla con la norma y se preserve el estilo arquitectónico de la época en que se construyeron.
En el caso específico del puente del barrio de La Salud, en la ciudad de Colima, el cual se encuentra destruido parcialmente, Martínez de la Rosa recordó que, al ubicarse en el centro histórico de la capital, por reglamento municipal el INAH tiene injerencia para conservar el paisaje y darle armonía con la perspectiva histórica.
“Los puentes han resultado dañados en varias ocasiones. Ahora, por la iglesia de La Salud está caído, en su parte externa el puente. Por estar en el centro, en este caso el Ayuntamiento de Colima debe coordinarse con nosotros para darle una imagen determinada al puente”, precisó.
Refirió que ese trabajo del INAH se enfocaría únicamente en preservar la estética del siglo XVI al XIX, época de la que datan la mayoría de los monumentos históricos del centro de la capital del estado, pues sería congruente con ese contexto urbano. Ello se aplica para cualquier construcción nueva en el centro, aclaró.
Finalmente, Julio Martínez explicó que la restauración o preservación de esos espacios históricos se hacen tomando en consideración de los arquitectos especialistas del INAH.