Rusia denunció que varios de sus diplomáticos destacados en Naciones Unidas están siendo presionados por Estados Unidos, y en concreto por su Buró Federal de Investigaciones (FBI), para que deserten.
“Nos enfrentamos a provocaciones constantes y materiales en internet. Hay gente que nos contacta. Por supuesto, son intentos inútiles, no sé qué esperan. Esta es una violación de las prácticas y protocolos diplomáticos”, dijo el embajador adjunto de Rusia ante la ONU, Dmitry Polyanskiy, a los periodistas.
Según Polyanskiy, algunos de esos contactos se han producido en plena calle, con individuos acercándose a diplomáticos rusos y diciéndoles que si quieren un futuro mejor saben a dónde pueden dirigirse o con intentos de entablar relaciones con ellos.
“A veces uno abre Twitter y hay un anuncio pop-up diciendo que el FBI cree que tienes que tener un futuro mejor y que dispone de esta u otra línea de contacto”, aseguró.
El representante ruso dijo que su país ha protestado varias veces ante Estados Unidos y ante el comité de la ONU para las relaciones con el país anfitrión, sin obtener resultados.
Preguntado sobre estas denuncias, el portavoz de Naciones Unidas, Farhan Haq optó por no comentar en concreto sobre las acusaciones, pero dijo que la organización está a menudo en contacto con Estados Unidos sobre su papel como país anfitrión y le pide que cumpla con todos sus compromisos en lo relacionado con el trato de las delegaciones extranjeras.