El Gobierno de México recibiría en los próximos meses recursos por alrededor de 60 millones de dólares derivados de la cobertura del Bono Catastrófico lanzado en 2020 en conjunto con el Banco Mundial (BM) y que cubriría los daños ocasionados por el huracán Otis en Acapulco, anunció Gabriel Yorio, subsecretario de Hacienda.
Según publica Reforma en su edición digital, tras su participación en el foro Finanzas Sostenibles MX23, el funcionario detalló que para que fluyan dichos recursos es necesario esperar el dictamen de un tercero sobre los daños ocasionados por el meteoro.
“Todavía no sabemos el monto porque hay que esperar a una dictaminación internacional que cierra las cifras de la magnitud del huracán. Aunque que ya sabemos que fue categoría 5, tenemos que esperar un pronunciamiento de un tercero que dice que efectivamente esta fue la magnitud y, con eso, ya podemos acceder a los recursos del Bono Catastrófico en el elemento de huracanes que pegan en el Pacífico.
“Estimamos que serían 60 millones de dólares que nos darían de cobertura por este evento, pero tenemos que esperar la dictaminación”, dijo Yorio.
El Bono Catastrófico tiene una cobertura por hasta 485 millones de dólares, y provee protección contra pérdidas derivadas por 4 elementos: sismos clase A (de alta intensidad) y clase B (baja intensidad), así como huracanes en el Atlántico y en el Pacífico.
El subsecretario de Hacienda refirió que la última vez que el Gobierno de México accedió a recursos del Bono Catastrófico debió esperar alrededor de 4 meses.
“No estamos esperando a que nos den el dinero del Bono Catastrófico. Eso nada más resarciría, compensaría, el flujo de caja que usaríamos para financiar la recuperación del Estado de Guerrero”, apuntó.
Ante ello, calculó, es probable que los recursos llegarían a las arcas federales hasta inicios de 2024.
“Para entonces ya abriríamos la economía del estado de Guerrero, como ha planteado el presidente”, agregó.
Según Reforma, durante su ponencia “Estrategia de Movilización de Financiamiento Sostenible” en el marco de Finanzas Sostenibles MX23, Yorio reconoció que el huracán Otis fue una muestra de que el cambio climático está teniendo ya un efecto en la recurrencia y la intensidad de los eventos meteorológicos globales, lo que a su vez tiene altos costos sociales.
“Hoy contamos con mecanismos de transferencia de riesgos como los seguros, los bonos para catástrofes. Además, se trabaja con el Banco de México en la medición y evaluación de riesgos ASG (ambientales, sociales y de gobernanza)”, finalizó.
Con información de Reforma
