A una semana de la conmoción por la muerte de Jesús Ociel Baena Saucedo y su pareja sentimental, Dorian Nieves Herrera, continúa el clamor de las voces de la comunidad LGBTTTIQ+ que piden justicia para le magistrade, quien rompió su “propio techo de cristal” para, desde su trinchera, impulsar los derechos de las disidencias sexogenéricas.
Más que un magistrado del Tribunal Electoral de Aguascalientes, Ociel Baena se convirtió en la primera persona no binaria en ser reconocida con un acta de nacimiento, una credencial de elector y un pasaporte bajo esa identidad de género; incluso, apenas unas semanas antes de su muerte fue reconocido como “maestre”, título bajo el lenguaje inclusivo que aún desata polémica.
Poco antes de su haber sido hallado sin vida, detalla El Heraldo de México, le magistrade reconoció haber recibido amenazas de muerte, e incluso durante una entrevista en el programa “La VerDrag”, transmitido en el Canal Once, se refirió a los discursos de odio de los que era objetivo: “Cada vez ha ido aumentando más el discurso de odio hacia mi persona, lo he visto en redes sociales, pero lo que más me lamenta son las amenazas de muerte que he estado recibiendo últimamente”, dijo, y afirmó que “del discurso verbal sigue la agresión física, y termina con asesinatos”.
Una de las voces que claman justicia por el caso, es la de la legisladora transgénero del Movimiento Regeneración Nacional (Morena), Salma Luévano, quien el pasado 15 de noviembre adelantó que pedirá a las diferentes fracciones partidistas de la Cámara de Diputados acompañar una iniciativa en contra de los discursos de odio, conocida como “Ley Ociel Baena”.
¿En qué consiste la iniciativa?
En conferencia de prensa, Luévano Luna expuso que, aunque polémica, la iniciativa pretende “castigar y sancionar los discursos de odio (…) a quienes inciten o promuevan discursos de odio” pues, dijo, además de seguir con la “misión” de Ociel Baena, se trata de un tema de dignidad: “No son caprichos los que estamos pidiendo son derechos humanos”, sentenció.
A través de un video en redes sociales, publicado el pasado 17 de noviembre, abundó en el asunto y aclaró que se trata de tipificar y sancionar los crímenes de odio en contra de las personas por su orientación sexual, identidad de género o expresión de género, pues, considera, “la falta de una perspectiva de diversidad sexual en la investigación, y una sanción acorde a la violencia con la que se cometen estos crímenes sólo genera impunidad”.
No obstante, refiere El Heraldo de México, la diputada ha pujado por el tema desde hace casi un año pues, de acuerdo con el Sistema de Información Legislativa (SIL), desde el 15 de diciembre de 2022 presentó una iniciativa para adicionar un artículo 315 tercero al Código Penal Federal, con el “objeto establecer las causas que determinen si la comisión del delito de homicidio constituye un crimen de odio”. En la iniciativa, destacan 2 propuestas clave:
Pena de 40 a 70 años de prisión cuando un homicidio se cometa en razón de la orientación sexual, la identidad de género, expresión de género, características sexuales, la raza, religión, discapacidad, etnia o nacionalidad de la víctima.
Se podrá inferir que el homicidio se dio por las razones anteriores cuando, entre otras, exista evidencia en redes sociales de que el responsable expresaba discursos de odio, existan denuncias previas de amenazas o lesiones por la víctima, existan antecedentes de amenazas o agresiones previas en centros de trabajo, escolares, en el entorno familiar, en espacios públicos o privados.
Con información de El Heraldo de México