La Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) acusó al Instituto Nacional de Migración (INM) México de discriminar a una familia colombiana a la que deportó en el Aeropuerto Internacional de Cancún pese a que tenían un vuelo de conexión a Ámsterdam, en los Países Bajos.
El organismo autónomo del Estado mexicano denunció que los agentes del INM en Cancún retuvieron a la familia, conformada por padre, madre y 2 hijas, les impidieron tomar su vuelo y los retornaron a su país de origen “sin que esas acciones se fundamentaran jurídicamente y sin atribuciones para ello”.
“A partir de las evidencias recabadas, se acreditaron violaciones a los derechos humanos a la seguridad jurídica y a la libertad de tránsito, en agravio de las cuatro personas”, indicó la CNDH en un comunicado.
La resolución de la comisión ocurre a partir de una queja presentada el 31 de mayo pasado por los hechos, ocurridos el 22 de mayo.
El organismo señaló que los agentes del INM elaboraron actas de rechazo que “no cubrieron los requisitos de seguridad jurídica”.
También concluyó que “se omitió brindarles las garantías procedimentales y procesales inherentes, transgrediendo sus derechos a la seguridad jurídica y al debido proceso”.
El hecho ocurre en medio de crecientes acusaciones de discriminación que comete el INM contra turistas suramericanos en los aeropuertos, en particular contra personas procedentes de Colombia, lo que ha despertado reclamos del Gobierno colombiano en años anteriores.
Las mayores denuncias se concentran en el aeropuerto de Cancún y en el Aeropuerto Internacional de Ciudad de México (AICM).
Además, la Asociación de Hoteles de Cancún, Puerto Morelos e Isla Mujeres envió una carta a la Secretaría de Turismo (Sectur) en febrero para denunciar que los “malos tratos” del INM, “principalmente hacia el mercado colombiano”, afectan al turismo.
Por el caso de la familia colombiana, la CNDH pidió al INM colaborar en la inscripción de las 4 personas en el Registro Nacional de Víctimas y “que proceda a la inmediata reparación integral del daño ocasionado”.
“De igual forma, deberá proporcionarles la atención psicológica que requieran, por parte de personal profesional especializado, de forma continua, atendiendo a sus necesidades específicas y con su pleno consentimiento”, indicó.
También le ordenó capacitar a sus agentes en materia de derechos humanos, y emitir una circular dirigida al personal para garantizar a los viajeros el derecho a sus vuelos de conexión.