La Asamblea General de Naciones Unidas aprobó la creación de un órgano para esclarecer la suerte y el paradero de las decenas de miles de personas desaparecidas durante la guerra civil siria y que el régimen de Damasco rechaza por considerarlo una interferencia en sus asuntos internos.
La creación de este nuevo organismo ha contado con el apoyo de 83 países, el rechazo de 11 y la abstención de 62.
La resolución fue rechazada por Rusia, China, Bielorrusia, Bolivia, Cuba, Corea del Norte, Eritrea, Irán, Nicaragua, Siria y Zimbabue.
Numerosas organizaciones civiles llevan años pidiendo la creación de este organismo, que llevará el nombre de “Institución Independiente sobre las Personas Desaparecidas en la República Árabe Siria”.
“Dada la complejidad y la magnitud de la cuestión de las personas desaparecidas en Siria, los actores existentes carecen de la capacidad para responder, por esta razón el secretario general de la ONU recomendó (…) que los Estados miembros consideren el establecimiento, a través de la Asamblea General, de una nueva institución internacional para arrojar luz sobre el paradero de los desaparecidos”, dijo el representante de Luxemburgo ante la ONU, Olivier Maes, uno de los patrocinadores del proyecto.
Un órgano apoyado por decenas de organizaciones sirias e internacionales
La semana pasada, un centenar de organizaciones sirias e internacionales, entre ellas Amnistía Internacional, Human Rights Watch, la Asociación de Detenidos y Personas Desaparecidas de la Prisión de Sednaya y la Coalición de Familias de Personas Secuestrada por el Estados Islámico escribieron un comunicado conjunto a la ONU para que dieran luz verde a su creación.
“Desde 2011, más de 100 mil personas han desaparecido o han sido objeto de desaparición forzada por parte de las autoridades sirias y otras partes en el conflicto, incluidos grupos armados como el Estado Islámico”, escribieron en una nota.
Los firmantes subrayaron que familiares y supervivientes sirios pidieron en 2021 la creación de una nueva institución independiente y humanitaria “que se centrara en el derecho inalienable de las víctimas a conocer la verdad sobre sus seres queridos”.
“Fueron estas familias las que pidieron ayuda a las Naciones Unidas”, subrayó hoy Maes ante la Asamblea General de la ONU.
Según Human Rights Watch, su creación contaba con el apoyo de la Secretaría General de la ONU, el alto comisionado de Derechos Humanos de Naciones Unidas y el Comité Internacional de la Cruz Roja, entre otras instituciones.
La Asamblea General de la ONU pidió hoy al secretario general, Antonio Guterres, que prepare en un plazo de 80 días el mandato de la nueva institución y exhortó “a todos los Estados, así como a todas las partes en el conflicto en la República Árabe Siria, a que cooperen plenamente con la Institución Independiente, en consonancia con las obligaciones que les incumben en virtud del derecho internacional”.