La relación entre Miami y Leo Messi no da señales de agotarse, como por el contrario sí lo han hecho los abonos para la temporada del próximo año del Inter Miami, el club de esta ciudad del sur de Florida en la Major League Soccer (MLS) y en el que milita el astro argentino.
La expectativa para ver al futbolista en la que será su primera temporada completa con la camiseta rosa es máxima, y así lo confirma la institución, que tiene entre sus dueños al exfutbolista inglés David Beckham.
La venta de todos los abonos para el próximo año, que se pusieron a la venta desde septiembre pasado, ocurre aun restando 2 semanas para que concluya la actual temporada y a falta de 3 meses para que arranque la siguiente.
Y es que la llegada el pasado verano del vigente campeón del Mundo con Argentina ha supuesto una revolución no solo para el equipo de las garzas, como se conoce al Inter Miami CF, sino para esta ciudad y para la industria del futbol en Estados Unidos.
De acuerdo al director general del club, el español Xavier Asensi, la institución proyecta para el próximo año unos ingresos de 200 millones de dólares, cifra que supone más del triple de lo acumulado antes de la llegada del astro argentino y casi el doble respecto a este 2023.
“El impacto de Messi ha sido el día y la noche para el Inter Miami”, reveló Asensi durante la conferencia Soccerex Miami celebrada a mediados de este mes en el barrio de Wynwood, donde precisamente se han multiplicado los murales en honor al capitán de la selección albiceleste, al igual que en el resto del sur de Florida.
El arribo del jugador también catapultó la cuenta oficial del club en Instagram, que pasó de poco menos de un millón de seguidores en junio pasado, cuando se confirmó que fichaba por la institución, a los 15.4 millones que tiene en la actualidad, ahora mismo más que cualquier otro equipo de la MLS y de la liga profesional de futbol americano (NFL) y de béisbol (MLB).
La camiseta oficial del 10 del Inter Miami, de igual modo, se ha erigido en la más vendida, según reveló a fines de septiembre la MLS, cuya cuenta oficial en Twitter un récord de tráfico cuando colgó el primer gol del argentino en su nuevo club: el tiro libre contra el equipo mexicano Cruz Azul.
Aquel encuentro disputado en el DRV PNK Stadium de Fort Lauderdale, la casa del Inter Miami, supuso el debut del argentino en el club estadounidense, y la entrada más barata en el mercado de reventa fue de 1,294 dólares y la más cara llegó a costar 23.737 dólares.
En la era pre-Messi, los aficionados podían conseguir una localidad hasta por 29 dólares.
Apple TV, que tiene los derechos de transmisión de la MLS en virtud a un contrato de 10 años que asciende a 2,500 millones de dólares, reveló en la conferencia de Miami que al menos un millón de personas han visto los partidos de Messi a través de su MLS Season Pass, cifra superior a otros deportes.
Las graderías de cada partido que tenía al rosarino sobre el césped fue igualmente imán para figuras del deporte y estrellas de Hollywood, entre ellos Lebron James, Leonardo DiCaprio, Owen Wilson, Selena Gómez y el príncipe Harry
