Victor Wembanyama se quedó muy cerca de firmar su primer milagro en la NBA, pero finalmente los San Antonio Spurs cayeron frente a Los Angeles Lakers por 119-122 y encadenaron su decimoctava derrota seguida.
Los Lakers, sin LeBron James por molestias en los gemelos, entraron al último cuarto con 18 puntos de ventaja (74-92) tras haber dominado el encuentro con comodidad desde el arranque.
Pero estos Spurs metidos en mil y un problemas se sacaron de la chistera una remontada furiosa en el último parcial, tanto que llegaron a ponerse a solo un punto con 22 segundos por jugarse y posesión para los Lakers.
Wembanyama fue clave en esa incendiaria reacción de los texanos, especialmente con 2 triples seguidos con menos de 90 segundos en el reloj.
Anthony Davis anotó 2 tiros libres para poner un +3 para los Lakers con 9 segundos por delante.
Wembanyama tuvo un triple para empatar el partido, pero falló el lanzamiento e hizo además falta en ataque tratando de sacar 3 tiros libres. Esa supuso además su sexta falta, por lo que fue expulsado, y los Lakers cerraron el triunfo con más apuros de los previstos.
Wembanyama y Davis se enfrentaron por primera vez y regalaron un duelo mayúsculo en la zona.
Davis, que había sido duda hasta última hora, consiguió 37 puntos, 10 rebotes y 4 robos mientras que Wemby logró 30 puntos (incluyendo 4 triples), 13 rebotes y 6 tapones.
Ningún jugador en la historia de la NBA había logrado hasta hoy en un partido la hoja de servicios que firmó el prodigio francés.
Davis dejó una de las acciones más espectaculares de la noche con un inmenso mate sobre Wembanyama, pero el número uno del último draft también presumió de carácter y orgullo con varias jugadas en las que superó a uno de los mejores defensores interiores de la liga.
Wembanyama no pudo, en cambio, medirse por primera vez a LeBron. No obstante, Spurs y Lakers volverán a enfrentarse este viernes en el que podría ser el primer cara a cara entre Wembanyama y LeBron, los 2 talentos generacionales del Siglo XXI que más expectación despertaron en su aterrizaje en la NBA.
Al margen de las buenas sensaciones del desenlace (tremendo 45-30 para San Antonio en el último cuarto), los Spurs siguen inmersos en una crisis muy profunda con en la peor racha de su historia en cuanto a derrotas consecutivas.
Colistas del Oeste con un desmoralizador balance de 3-20, los de Gregg Popovich no ganan desde el pasado 2 de noviembre, cuando se impusieron a los Phoenix Suns para ponerse con un prometedor 3-2 del que a estas alturas ya nadie se acuerda.
El único consuelo para los Spurs es que los Detroit Pistons atraviesan un momento aún más triste que ellos: 21 derrotas seguidas y últimos del Este con el peor balance de la liga (2-22).
