El Pentágono informó que el secretario de Defensa, Lloyd Austin, no se encuentra en la unidad de cuidados intensivos, se recupera en una zona privada del Centro Médico Militar Nacional Walter Reed, a las afueras de Washington, y que su pronóstico es bueno.
“Se está recuperando bien y está con buen ánimo. Ya no está en la unidad de cuidados intensivos, sino en una zona más privada del hospital. Sigue experimentando algunas molestias, pero su pronóstico es bueno”, indicó en un comunicado el portavoz del Pentágono, general de brigada Pat Ryder.
La hospitalización del secretario de Defensa ha estado rodeada de secretismo y ha provocado que la Casa Blanca anunciara este lunes que se revisarán los protocolos de información sobre el estado de salud de altos funcionarios.
Según comunicó el Pentágono la semana pasada, Austin se sometió a un procedimiento médico el 22 de diciembre, regresó a casa un día después y el 1 de enero comenzó a experimentar un dolor intenso y volvió al hospital a cuidados intensivos.
El portavoz de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, John Kirby, afirmó este lunes que la Presidencia estadounidense no fue informada hasta el pasado jueves por la tarde.
Este lunes se precisó que desde que Austin retomó sus funciones el viernes por la noche ha estado recibiendo información operativa y brindando la orientación necesaria.
Sigue monitoreando las operaciones del Departamento de Defensa en todo el mundo, según esa nueva nota, y está en contacto con su equipo.
El Pentágono rechazó especificar la fecha en la que está previsto que se le dé de alta y avanzó que seguirá ofreciendo actualizaciones diarias sobre su estado.