Ucrania considera que el Ejército ruso sigue perdiendo personal y equipamiento militar de forma masiva en sus intentos de ganar más territorio en el este y el sur del territorio ucraniano, donde volvió a sufrir este lunes más de mil bajas y la destrucción de 24 carros de combate, según el balance de hoy del Estado Mayor.
Rusia también ha perdido durante las últimas 24 horas 36 vehículos blindados y 30 sistemas de artillería, así como un avión de reconocimiento capaz de detectar objetivos a una distancia de 600 kilómetros y un bombardero que operaba como puesto aéreo de control para la aviación rusa.
Según el portavoz de la Fuerza Aérea ucraniana, Yuri Ignat, es “probablemente la primera vez” que Rusia pierde un avión de reconocimiento A-50 como el que el Ejército ucraniano derribó este lunes sobre el Mar de Azov, un mar interior situado al sureste de Ucrania cuyas costas están controladas por completo por Rusia.
Ignat reconoció que “Rusia aún tiene operativos varios aviones radar de detección a larga distancia”, pero previó que la Fuerza Aérea rusa actúe a partir de ahora con más cautela para evitar nuevas pérdidas como las sufridas este lunes sobre el Mar de Azov.
Rusia recuperó en el mes de otoño la iniciativa en casi todo el frente, sin que de momento esté consiguiendo avances significativos pese a sufrir un gran número de pérdidas en sus intentos por ganar más terreno.