El director del Instituto Colimense de la Discapacidad (Incodis), David Monroy, reveló que los ayuntamientos de Manzanillo, Tecomán, Minatitlán, Ixtlahuacán, Coquimatlán, Armería y Cuauhtémoc, no se han acercado ni solicitado cursos y capacitaciones para el Lenguaje de Señas, cuya aplicación es indispensable para cumplir con el derecho humano de la accesibilidad a las personas sordas.
“El acercamiento no se ha dado; los motivos no los podría yo suponer, porque les tocaría a ellos decir por qué no han dado ese paso. Nosotros hemos estado enviando invitaciones y oficios recordando el deber que tenemos de garantizar la accesibilidad, pero con quienes se han acercado hemos venido trabajando”, afirmó.
Refirió que los únicos ayuntamientos con los cuales ha habido una respuesta a esos oficios y que se han acercado para solicitar los cursos, capacitaciones y talleres en Lengua de Señas, son los ayuntamientos de Colima, Villa de Álvarez y Comala, con los cuales se ha ido trabajando.
“Hemos trabajado ya con el Ayuntamiento de Villa de Álvarez, con el de Colima, específicamente con la Dirección de Seguridad Pública y estamos programando un taller de Lengua de Señas con el de Colima. Son los que han mostrado un interés importante, para que el servicio público que ofrecen maneje la lengua de señas”, refirió.
Además, afirmó que se ha hecho un trabajo intensivo para enseñar la Lengua de Señas a funcionarios de la administración pública estatal y también municipal, incluso de la iniciativa privada, pues se trata de un derecho que está establecido como un derecho humano en las leyes y convenciones internacionales.
“En ese contexto nos hemos dado la tarea de intensificar la enseñanza de la Lengua de Señas para tener en Colima más usuarios y más intérpretes. El año pasado dimos 15 talleres de capacitación a compañeros servidores públicos de la administración estatal. Capacitamos a más de 100 servidores públicos en el nivel básico”, puntualizó
Finalmente, David Monroy puntualizó que en la medida que se enseñe el Lenguaje de Señas en el estado, se tendrá una mayor cantidad de intérpretes que garanticen esa accesibilidad, cumpliendo así con ese derecho humano de las personas no oyentes.
“La Lengua de Señas se convierte en un elemento de accesibilidad y está consagrada la accesibilidad como derecho en la convención internacional de los derechos de las personas con discapacidad. Es decir, la accesibilidad es un derecho y uno de los elementos de apoyo para las personas sordas es la lengua de señas”, sentenció.
