El Departamento de Justicia de Estados Unidos cerró en 2011 la investigación sobre supuestos pagos del narcotráfico a la primera campaña presidencial del actual mandatario de México, Andrés Manuel López Obrador, confirmó a EFE una persona familiarizada con lo sucedido.
Un reportaje del portal ProPublica con fuentes de la agencia estadounidense antidrogas (DEA) señaló que el Cártel de Sinaloa habría aportado 2 millones de dólares a la fallida campaña de López Obrador en las elecciones de 2006, algo que el mandatario calificó este miércoles de “calumnia”.
La fuente familiarizada confirmó que el Departamento de Justicia estadounidense llevó a cabo una indagación hace 13 años que condujo bajo el “protocolo de manejo de investigaciones internacionales sensibles” y que acabó cerrando.
La investigación estuvo “limitada en el tiempo” y se restringió solo a los delitos relacionados con las drogas.
Un portavoz del Departamento de Justicia dijo a EFE que respeta “plenamente la soberanía de México” y que está comprometido a trabajar con las autoridades mexicanas “para combatir a los cárteles de la droga responsables de tanta destrucción en ambos países”.
Según la información de ProPublica, el dinero del Cártel de Sinaloa habría sido entregado a los asesores de la campaña a cambio de la promesa de que una futura administración de López Obrador facilitaría las operaciones criminales de los traficantes.
La investigación no determinó de manera concluyente si López Obrador conocía ese trato y fiscales estadounidenses expresaron suspicacias de que un operativo pudiera ser visto en México como una intromisión a su soberanía por parte de Estados Unidos.
En su rueda de prensa matutina, López Obrador dijo que la información “es falsa, es una calumnia” y criticó al Gobierno estadounidense de estar detrás de la filtración para dañar su imagen.
“Si hay algo que no les gusta, pues que lo planteen abiertamente, que no lo manden a decir. La política es un imperativo ético, porque esto es calumniar”, apuntó.
López Obrador, quien siempre ha sido crítico con la opacidad de las operaciones de la DEA en territorio mexicano, aseguró que este tipo de información se da por el periodo de elecciones presidenciales que viven este año México y Estados Unidos.