El debate sobre la “ley ómnibus” se retomará este jueves en la Cámara de Diputados después de que el oficialismo lograra un cuarto intermedio (receso) en la sesión iniciada hoy para seguir avanzando en acuerdos con otros bloques.
Después de las 9:30 de la noche hora local, se procedió al receso y se convocó a los legisladores para mañana a las 12 del día.
El oficialismo, en franca minoría en el Congreso, precisa apoyos para sacar adelante la Ley de Bases y Puntos de Partida para la Libertad de los Argentinos, más conocida como “ley ómnibus”, proyecto estrella del Ejecutivo de Javier Milei.
Se espera que en las próximas horas aún siga negociando con los bloques más cercanos para reducir aún más los 664 artículos con los que comenzó este proyecto, rebajados a 386 antes de la sesión de este miércoles.
Por su parte, la oposición sigue reclamando el texto definitivo que, denuncia, no haber recibido todavía.
Fuera del Congreso, continúa la concentración de diversas organizaciones contra la política de ajustes del Ejecutivo del libertario, horas después de que hubiera incidentes con las fuerzas federales desplegadas en la zona.
Por el momento, no ha trascendido que haya heridos en los enfrentamientos, aunque sí ha habido numerosas personas afectadas por el lanzamiento de gases lacrimógenos y gas pimienta, como pudo comprobar EFE.
Pese a que la concentración de organizaciones sociales, civiles y sindicales se mantuvo durante todo el día en calma, pasadas las 5:30 de la tarde el intento de algunos manifestantes de invadir la calzada, algo prohibido en el protocolo vigente del Ministerio de Seguridad, llevó a una dura contención de las fuerzas federales desplegadas en torno al Congreso de la Nación.
Una doble hilera de policías que, incluso, llegaron a avanzar motorizados contuvieron a los activistas sobre la acera de la sede parlamentaria.
No obstante, las miles de personas que fueron agolpándose en la plaza a medida que caía la tarde en Buenos Aires ampliaron el radio de acción de la protesta e intentaron cortar el tránsito, uno de los límites establecidos por el protocolo implementado por la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, presentado pocos días después de la asunción del nuevo Gobierno, que tuvo lugar el 10 de diciembre.
Cientos de agentes de 3 cuerpos nacionales -Gendarmería, Prefectura y Policía Federal- se desplegaron en la zona para contener a los manifestantes, que, pese a ello, llegaron a cortar varios carriles en la intersección entre la avenida Callao, que nace precisamente en la Plaza del Congreso, y la avenida Rivadavia, en pleno centro de la capital argentina.