La candidata de la coalición opositora a las elecciones de julio en México, Xóchitl Gálvez, asegura que si resulta ganadora recuperará las relaciones con Europa, y en especial con España, país al que dice que el actual presidente de su país, Andrés Manuel López Obrador, “reclama lo que su gobierno no ha hecho por los pueblos indígenas”.
Gálvez se encuentra en Madrid en una breve visita tras su viaje a Estados Unidos, durante la que se reunirá con empresarios, organizaciones sociales y representantes de los principales partidos políticos.
Su idea es, además, “dejar claro en España que hay una relación a futuro importante con México”, después de “esta pausa”, dijo este domingo en una entrevista con EFE en la capital española la candidata, a quien le hubiera gustado visitar otros países de la Unión Europea, “pero los días no daban”.
Aún así no quiso solo dar importancia a la relación con sus vecinos de Estados Unidos, “que es mucha”, ya que “también lo es en lo comercial y cultural con Europa, y en especial con España, pues nos unen sinnúmero de cosas”.
“Creo que si no podemos cambiar el pasado, sí podemos cambiar el futuro”, afirmó Gálvez, responsable de la Comisión Nacional para el Desarrollo de los pueblos indígenas durante el mandato del expresidente Vicente Fox.
“El Gobierno mexicano está obligado a cambiar el futuro de los pueblos indígenas a través del reconocimiento de derechos”, añadió la candidata del Frente Amplio por México, quien acusó a López Obrador de reclamar a España lo que su Gobierno no ha hecho.
Dos mujeres y una elección muy cerrada
De regreso a México, Gálvez se centrará en el inicio de la campaña que augura será “muy apretada”. No hace mucho caso de las encuestas, ya que considera que “no han sido muy acertadas” y están influidas por una clara intención del oficialismo de “inflarlas para que la gente no participe”.
“Y en cualquier caso, hace 2 meses estaba a 30 puntos (de la candidata del oficialista de Morena, Claudia Sheinbaum) y hoy estoy a 16. Lo único que queda claro es que estoy creciendo”, destaca.
También denuncia que hay casi un 50% de mexicanos que deciden no contestar a las preguntas de los sondeos, por lo que no se sabe cuál es su intención a la hora de votar.
“Pero sé que va a haber una gran sorpresa, lo siento en la calle. Hace 6 años también fui candidata al Senado y me daba cuenta de las brechas. Hoy no noto ese rechazo. Viene una contienda sumamente cerrada entre los que no contestan por miedo a que les quiten los programas sociales y los que dicen ‘se acabó’”.
Las candidaturas de Gálvez y Sheinbaum, exjefa de Gobierno de la Ciudad de México, seguidas de lejos por Jorge Álvarez Máynez, de Movimiento Ciudadano, sitúan por primera vez en la historia a 2 mujeres en la puja por la Presidencia de México.
“Me parece súper importante que estemos 2 mujeres, ambas con mérito propio, encabezando la lucha por la presidencia. Yo no le quito mérito a la candidata de López Obrador, lástima que ella no pueda tener la fuerza que debería de tener”, señala Gálvez.
Su candidatura, explica, es la de una mujer que “viene desde abajo, acostumbrada a luchar y a vencer”, mientas que Sheinbaum representa “continuidad, es decir claudicar a la inseguridad, a una mala gestión sanitaria, a la extorsión, a los problemas del campo, a la sequía …”.
“Yo lo que he establecido es que se acabaron los abrazos para los delincuentes. Yo no voy a ir a saludar a la mamá del Chapo Guzmán”, subraya.
Acuerdos bilaterales sobre migración
Gálvez critica también la política migratoria de López Obrador, que en su último acuerdo con Estados Unidos “aceptó ser un tercer país seguro, sin nada a cambio”, por lo que los inmigrantes “están en condiciones realmente lamentables”.
“Lo que yo he planteado es que, antes de aceptar ser tercer país seguro, haya 2 cosas: recursos para que esperen en México y que los inmigrantes mexicanos o los mexicanos que residen en Estados Unidos tengan acceso a una posibilidad de regularización, porque muchos de ellos cumplen los requisitos, pero no tiene abogados”, indica.
La candidata del Frente Amplio por México sabe que podría llegar a coincidir con el expresidente norteamericano Donald Trump en una hipotética futura presidencia, algo que no le preocupa, ya que “al final es un hombre práctico y yo también”.
“¿Qué es lo que más le conviene a Trump?, que México crezca económicamente y que genere empleos bien pagados. Con el actual Gobierno no ha habido nada de eso. Mi visión es mucho más empresarial, mucho más de desarrollo y crecimiento económico. Y creo que ahí nos entenderíamos bien”, concluye.