Aunque el Volcán de Colima lleva 7 años en calma, la Universidad de Colima continúa monitoreándolo y se siguen mejorando los sistemas de vigilancia, señaló en una entrevista el investigador del Observatorio Vulcanológico de la Máxima Casa de Estudios del estado, Mauricio Bretón González.
Recordó que el 3 de febrero del año 2017 fue la última explosión registrada en el Volcán de Colima, con una columna superior a los 7 kilómetros, y a partir de ese momento el volcán entró en una etapa de calma.
El también responsable del proyecto de La Casa del Volcán de la Universidad de Colima, consideró que a pesar de la calma es necesario seguir ocupados en el volcán.
“Se sigue monitoreando por parte de la Universidad de Colima, seguimos mejorando los sistemas de vigilancia porque es el momento que nos da para mejorar la instrumentación y continuar instalando equipos”, indicó.
Dijo que se tiene que tener en cuenta que, en cualquier momento, como lo ha demostrado a nivel histórico, puede reactivarse y volver a iniciar una fase eruptiva como la de 1998 hasta 2017.
De igual manera, mencionó que a lo largo de la historia el volcán de Colima ha demostrado distintas fases eruptivas, ha registrado erupciones muy fuertes después de una etapa de actividad constante y en ocasiones, como la actual, “tenemos un silencio volcánico, sin embargo, no podemos descartar que en cualquier momento la actividad pueda volver y mantenerse otros 20 años, como ocurrió en la última etapa”.
Mauricio Bretón señaló que la inactividad que presenta el volcán en este momento no es para preocuparse pues saben cómo se comporta, “conocemos la historia del volcán y sabemos que tiene etapas de silencio en donde no se reflejan explosiones, pero esto hace que sigamos vigilándolo”.
Añadió que los volcanes no deben estudiarse solamente cuando están activos, sino cuando están inactivos para poder conocer cómo se presenta todo el ciclo eruptivo.
En ese sentido, insistió en que siguen trabajando, incorporando y mejorando las condiciones del monitoreo y la vigilancia.
El investigador de la Universidad de Colima destacó que debido al número de eventos que se han presentado durante los últimos 500 años, el Volcán de Colima es el más activo de todo el país, sin embargo, el que tiene más riesgo es el Popocatépetl por el número de personas y de infraestructura que hay alrededor.