El Alianza Lima rechazó la decisión del Gobierno de Perú de cerrar el acceso a la tribuna popular de su estadio y pidió una reunión con la presidencia del Consejo de Ministros (PCM) para explicar las medidas que ha tomado para luchar contra la violencia vinculada con el futbol.
Medios locales publicaron una carta enviada por el administrador del Alianza, Diego Guerrero, para rechazar “cualquier sanción que tenga relación directa o indirecta” con un enfrentamiento que se produjo el sábado pasado entre supuestos aficionados de su equipo y del Universitario de Deportes, que dejó a 4 personas heridas de bala, entre ellas 2 niños.
En la carta, que fue enviada al primer ministro peruano, Alberto Otárola, el Alianza confirmó que se opuso a firmar el acta de una reunión que sostuvieron dirigentes deportivos con el Gobierno en la que se acordó cerrar el acceso a las tribunas populares de su estadio y el de la U.
El equipo del distrito limeño de La Victoria aseguró que no puede ser sancionado “por hechos ajenos, en el marco de la celebración de un espectáculo deportivo que no fue organizado” por ellos.
Rechazó, además, “enérgicamente todo acto de violencia en los espectáculos deportivos” y señaló que está dispuesto a “participar en toda campaña que busque eliminar la violencia en los estadios”, aunque aseguró que Universitario de Deportes “debe asumir la responsabilidad” por los sucesos del último sábado.
El administrador del Alianza también solicitó a la PCM una reunión para exponer el trabajo que realiza en la organización de espectáculos deportivos y ofrecer sus propuestas para “la erradicación y sanción de la violencia deportiva” en el país.
Otárola anunció este martes que la U y el Alianza Lima, los equipos más populares del futbol peruano, jugarán sus próximos partidos del torneo local sin permitir el acceso de sus aficionados a las tribunas populares de los estadios.
Según la información, el cierre de las tribunas populares aplicará, en principio, para el partido que jugará este fin de semana el Alianza Lima contra el Comerciantes Unidos, y la próxima semana el Universitario contra el Sport Huancayo.
“El caso de que haya habido 2 niños heridos de bala nos lleva a la necesidad de tomar este tipo de decisiones, que no busca que los clubes quiebren. Que sea un mensaje de reflexión. Esperamos la colaboración de los clubes”, enfatizó Otárola.
Durante la reunión también se acordó que los 2 equipos deberán realizar campañas de concienciación para “acabar con el discurso de odio, sobre todo instalado en las redes sociales”.
En la rueda de prensa en la que se hizo este anuncio participó el administrador del Universitario, Jean Ferrari, aunque no asistió ningún representante del Alianza.