Un año después del accidente donde 10 mineros quedaron sepultados en la mina de carbón de El Pinabete, en Coahuila, aún queda pendiente la recuperación de los cuerpos.
“El Gobierno de México se mantiene al frente de las acciones para concluir la excavación del tajo a cielo abierto y, con ello, iniciar la recuperación de los trabajadores”, señalaron en un comunicado la Comisión Federal de Electricidad (CFE), la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC) y la Coordinación Nacional de Protección Civil (CNPC).
Las autoridades mencionaron que este jueves se realizó una ceremonia luctuosa para recordar a los mineros que murieron el 3 de agosto de 2022 en la mina El Pinabete.
Recordaron que a partir del accidente, el Gobierno federal apoyó a las familias de los 10 mineros con un campamento con servicios básicos y un área hospitalaria “donde se les dio acompañamiento e información de manera permanente”.
Además, dijeron que durante los primeros 10 días de septiembre de 2022 se les otorgó una indemnización económica y se pidió consentimiento para iniciar con el programa de recuperación de los cuerpos, que las familias de los mineros concedieron.
Asimismo, aseveraron que los trabajos se mantienen las 24 horas, los 7 días de la semana, para el retiro de escombros y realizar las actividades de rescate de los cuerpos.
“Se han excavado y retirado más de 2.5 millones de metros cúbicos de suelo y roca”, destacaron.
Explicaron que han instalado una red de bombeo para desalojar el agua para la excavación del tajo y se construyen pozos para la gestión del agua de las galerías.
En tanto, dijeron, se ejecutan las primeras pruebas de eficiencia de los tapones hidráulicos, de las que se obtendrán los resultados “que ayudarán a tomar decisiones respecto a los métodos complementarios para mitigar las filtraciones de agua en el tajo”.
Si hay resultados favorables, añadieron, iniciarán las tareas de búsqueda y recuperación de los mineros.
Las autoridades mexicanas habían reportado en abril pasado un avance del 54% en los trabajos de rescate para recuperar los cuerpos de los 10 mineros atrapados en El Pinabete.
Tras el incidente, el presidente Andrés Manuel López Obrador prometió recuperar los cuerpos en unos meses, pero en junio pasado reconoció que el proceso tardaría hasta 2024.
El derrumbe reactivó la polémica en México por la actuación de las mineras en la región carbonífera, donde se han registrado más de 100 muertes de personas dedicadas a la minería, de acuerdo con la Familia Pasta de Conchos, que agrupa a familiares de fallecidos en el derrumbe de 2006 en la mina de ese nombre.