Un día después de la explosión en una gasolinera en Lima que causó la muerte de una persona y decenas de heridos, el olor a gas sigue presente en las calles cercanas al lugar del accidente, que, según los vecinos, se podría haber evitado puesto que habían denunciado el riesgo que existía.
“Explotó y las cortinas han caído encima de la cama, nos levantamos rápido para ir a ver a los chicos. Mi hijito de 5 años se tapaba los oídos con las manos y el de 15 años me dijo que le había entrado un pedazo de vidrio en la boca. Hemos salido asustados buscar refugio porque no sabía lo que podía pasar”, relató a EFE Loida Camacho, una de las vecinas cercanas a la gasolinera.
La explosión, que se produjo este lunes poco antes de las 5 de la tarde en el popular distrito de Villa María del Triunfo, rompió cientos de ventas, puertas y lunas de vehículos de hasta un kilómetro alrededor del lugar de los hechos.
“Ha sido algo espantoso, como si fuera una bomba, las lunas han salido reventadas. Mi hijo se puso muy nervioso”, comentó Aldo, otro vecino, antes de afirmar que, por suerte, solo tienen que lamentar daños materiales, pero que esperan que alguien los reconozca.
Según las últimas informaciones oficiales, la explosión causó la muerte de una persona que trabajaba en la estación de servicio y 46 heridos.
“En mi casa están rotas las ventanas, la lavadora y las mamparas, los chicos están traumados, nerviosos. ¿Los daños psicológicos quién los repara? cuenta Betty, que vive a unos 800 metros de la estación de combustible.
Explica, indignada, que el olor a gas es habitual en la zona y que los vecinos ya habían avisado ante la comisaría de Policía y la Municipalidad que esta gasolinera tenía fugas, pero que nunca les hacían caso.
En este sentido, Camacho asegura que todos los días hay olor a gas, que llegan camiones para abastecer, y en la gasolinera no esperan a que estos acaben para atender a los clientes.
“Acá están abasteciendo y a la vez están atendiendo, ellos no pierden, ellos no tienen pérdidas. Nosotros hemos perdido ahorita, y por su negligencia de no parar mientras el camión está descargando, probablemente ha pasado todo esto”, dice Camacho en las puertas de su casa, que se encuentra inhabitable.
El Ministerio de Interior informó este martes que la Policía Nacional y el Cuerpo General de Bomberos Voluntarios continúan trabajando intensamente en la zona donde ocurrió la explosión y donde más de 50 efectivos policiales se encuentran ejerciendo sus funciones de resguardo y seguridad.
De otro lado, más de 40 bomberos siguen enfocados en el control de la fuga de gas.
Por su parte, la municipalidad de Villa María del Triunfo emitió un comunicado en el que exige a la gasolinera, de la marca Primax, “la inmediata activación de su seguro contra los daños materiales ocasionados a los cientos de familias”, culminar los trabajos para controlar la fuga, habilitar espacios seguros para los vecinos, e informó se procederá a la clausura definitiva de la estación de servicios”.