La India reabrió las urnas por sexta vez a lo largo de más de un mes de elecciones generales, las más largas y concurridas del planeta, que completará este sábado la penúltima de 7 fases, con más de 110 millones de votantes en 8 regiones del país, incluida la capitalina NUeva Delhi.
Los colegios electorales abrieron a las 7 de la mañana en 8 estados y territorios del país sin que se reportaran contratiempos, para elegir 58 de los 543 escaños de la Lok Sabha, la Cámara Baja del Parlamento indio, según la Comisión Electoral de la India (ECI).
Alrededor de 11.4 millones de funcionarios electorales trabajan en esta fase con 111.3 millones de votantes convocados a 1.14 millones de colegios electorales.
De acuerdo con la ECI, para esta etapa están inscritos 5.84 millones de hombres; 5.29 millones de mujeres y 5,120 electores del tercer género.
Nueva Delhi tiene 7 de los 543 escaños parlamentarios, pero su valor con el centro del poder político de la India le dan gran significado. El Bharatiya Janata Party (BJP) del primer ministro indio, Narendra Modi, favorito de estas elecciones, buscar reeditar su victoria de 2019 con el control de todos los distritos electorales de esta fase.
El partido gobernante se enfrenta esta vez al desafío de una coalición de 28 partidos opositores encabezada por el Partido del Congreso, que ha presentado un frente conjunto.
Modi es ampliamente considerado el favorito para ganar los comicios y sellar un tercer mandato consecutivo, hasta tal punto de que las dudas se centran solo en cómo de grande será su mayoría.
Las elecciones de 7 fases continuarán hasta el 1 de junio, y los votos se contarán el 4 de junio.
Con más de 1,400 millones de habitantes, la India tiene 970 millones de votantes, y se registra habitualmente una alta participación de cerca del 70%.