El secretario de Estado de EUA, Antony Blinken, afirmó que su país le ha “dejado claro” a los líderes militares de Níger que les atribuirá la responsabilidad de “la seguridad y el bienestar” del presidente depuesto Mohamed Bazoum.
En respuesta a una pregunta de EFE, Blinken dijo en una rueda de prensa que él mismo ha tenido ocasión de hablar con Bazoum una media docena de veces, la última anteayer, después de que a finales de julio el presidente de Níger fuera depuesto por los militares, que han creado una junta castrense que gobierna el país.
El jefe de la diplomacia estadounidense manifestó la “profunda” preocupación de su Gobierno por Bazoum y su familia.
Agregó que en sus conversaciones han hablado de la “restauración del orden constitucional” y recordó que la subsecretaria de Estado, Victoria Nuland, visitó esta semana Níger, donde tuvo ocasión de verse con algunos de los líderes militares para exigirles que restauren el orden constitucional.
Durante su visita a Níger, la diplomática se reunió durante unas 2 horas con el autoproclamado jefe de Defensa de la junta, Moussa Salaou Barmou, y otros 3 generales que le apoyan.
Nuland intentó encontrarse con el autoproclamado líder de la nueva junta militar, el general Abdourahamane Tchiani, pero no se le permitió hacerlo.
También trató de verse con Bazoum, quien se encuentra en arresto domiciliario, pero se le negó el acceso. No obstante, Nuland pudo hablar por teléfono con él y conocer de primera mano “su perspectiva” sobre lo que ha ocurrido en Níger y lo que podría deparar el futuro.
Desde el golpe de Estado del pasado 26 de julio, Estados Unidos ha afirmado mantener abiertas las vías para el diálogo, pero también ha intentado ejercer presión sobre la junta militar, congelando más de mil millones de dólares en programas de asistencia al gobierno hasta nuevo aviso.