Los Chicago Bears, sin la primera elección absoluta del último draft, Caleb Williams, ganaron este jueves por 21-17 a unos Houston Texans también repletos de ausencias, en el anual partido del Pro Football Hall of Fame, una exhibición de pretemporada organizada en el Tom Benson Hall of Fame Stadium de Canton (Ohio).
El encuentro fue abandonado de manera temporal, en el tercer cuarto, a causa de una fuerte tormenta eléctrica en Canton.
Sin Caleb Williams, los focos estaban en Tyson Bagent y Brett Rypien, los 2 jugadores que pelearán por ser la primera alternativa al quarterback de USC, elegido con el número uno absoluto en el draft de este año por los Bears.
Y el ganador fue Rypien, quien lanzó para 166 yardas (11 de 15 en pases), con 3 pases de anotación y ninguna interceptación. Bagent conectó 2 de sus 3 pases, para un total de 16 yardas, sin TD.
Collin Johnson selló 2 touchdowns y Tommy Sweeney firmó el otro para los Bears. Ambos lograron 3 recepciones, para 56 y 47 yardas, respectivamente.
En los Texans, Davis Mills lanzó para 102 yardas (10 de 13 en pases), con un pase de anotación. Teagan Quitoriano (2 recepciones y 1 TD) y Cam Aikers (2 recepciones y un TD) fueron sus principales socios.
Los Bears compitieron sin ningún titular en Canton, pero Caleb Williams estuvo a pie de campo siguiendo al resto de sus compañeros.
Williams, de 22 años, fue elegido con el número uno absoluto en el último draft tras un extraordinario paso por USC que le permitió hacerse con el Heisman Trophy, el premio anual al mejor jugador de futbol americano universitario.
El nativo de Washington devolvió la ilusión a una franquicia que, tras 5 años con récord negativo en la temporada regular, arranca el nuevo curso con la ambición de ser protagonista.
Al margen de Williams, los Bears seleccionaron al talentoso receptor abierto Rome Odunze con el número 9, ficharon al también wide receiver Keenan Allen y renovaron el contrato de DJ Moore, otra arma a disposición del quarterback.
Por su parte, los Texans potenciaron a un equipo que se encomienda al jugador de segundo año CJ Stroud, un quarterback que en su temporada de novato lanzó para 4,108 yardas y 23 touchdowns, con apenas 5 interceptaciones, números estelares que le convirtieron en rookie de la temporada.
Pusieron a su lado a Stefon Diggs y al running back Joe Dixon, además de reforzar su defensa con Danielle Hunter y Denico Autry, 2 de los jugadores que más capturas lograron en la última temporada.
La temporada regular de la NFL comenzará el 5 de septiembre con los Kansas City Chiefs, vigentes campeones, que recibirán en Arrowhead a los Baltimore Ravens.